La madre de Cristiano Ronaldo ha tenido un gran detalle con el Papa Francisco. Este miércoles, Dolores Aveiro tuvo un contacto con el pontífice en el Vaticano. Cuando ambos personajes estuvieron cara a cara, la mujer sacó de una bolsa (estampada con las siglas ‘CR7′) una camiseta de la selección portuguesa.
Enseguida, la progenitora del astro de Manchester United entregó la casaca del combinado nacional luso que tiene el nombre del futbolista y el característico número siete. Entonces, como suele ocurrir en este tipo de situaciones, Jorge Mario Bergoglio recibió con mucha sorpresa el especial obsequio.
Doña Dolores asistió a la audiencia del Papa, aprovechando un viaje realizado a Roma. Tras el acto, el religioso se acercó a saludar a los asistentes. Fue en ese momento en el que se produjo la entrega de la casaquilla de Cristiano Ronaldo. Una prenda que se suma a la enorme cantidad que Francisco posee en su colección.
“Emoción única, muchas gracias, Papa Francisco”, escribió la mamá del astro portugués a través de un mensaje publicado en Instagram. La postal que subió muestra a la mujer extendiendo la camiseta del goleador frente al Sumo pontífice, quien estira las manos para recibir un regalo significativo.
Jorge Mario Bergoglio, de 85 años, siempre ha comentado que es muy fanático del fútbol. Es más, el nacido en Buenos Aires ha revelado que es hincha de San Lorenzo de Almagro, uno de los clubes más popular de Argentina. No solo eso, el religioso también es socio del ‘Ciclón’ y su fecha de registro es del 12 de marzo de 2008.
En cuestión de semanas, el Papa Francisco estuvo relacionado con los dos mejores futbolistas del planeta: Cristiano Ronaldo y Lionel Messi. En ambos casos, por coincidencia, el vínculo se realizó por camisetas. Del luso, a través de su madre, recibió una. Con el argentino, por un intermediario, le dedicó un mensaje.
Emmanuel Gobilliard, obispo de Lyon, visitó al futbolista de PSG para darle la camiseta del club Athletica Vaticano. La prenda tenía inscrito un mensaje por parte de su compatriota y, de ese modo, devolvió el gesto. El octubre del año pasado, Leo Messi envió su elástica con el número 30 al Papa con el ministro francés Jean Castex.
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