Barcelona recibió dos goles en el primer tiempo de la final de la Copa del Rey ante Valencia y los jugadores azulgranas protagonizaron un tenso momento a la salida del vestuario.
En el túnel que desemboca a la cancha del estadio Benito Villamarín se reunieron los jugadores de Barcelona para iniciar el segundo tiempo. Gerard Piqué tomó la palabra y sus gestos eran de fastidio.
Piqué se dirigió a Ivan Rakitic ante la mirada de Coutinho y Malcon. Sin embargo, Sergio Busquets interrumpió luego que Rakitic manifestara su malestar por las palabras del defensor azulgrana. En medio de la derrota se vivieron momentos acalorados en la interna de Barcelona.
Un gol de Kevin Gameiro, a los 21 minutos, y otro de Rodrigo Moreno, en el 33, le daban la ventaja al Valencia (0-2) al descanso de la final de la Copa del Rey que disputa frente al Barcelona.
Los valencianos, muy fiables atrás ante los intentos ofensivos azulgranas, siempre sin éxito, gozaron pronto de su primera opción conforme al guión que perseguían. Fue a los 5 minutos, cuando el balón llegó a Rodrigo Moreno tras un error de Lenglet, regateó al holandés Cillessen y su tiro lo sacó bajo los palos Gerard Piqué.
Barcelona siguió en busca del gol, pero sin profundidad ni claridad de ideas. Tocaba y tocaba para hallar huecos, aunque sin la verticalidad ni la contundencia necesarias. Todo lo contrario que el Valencia, que se adelantó a los 21 minutos en un rápido ataque de Gayà por la izquierda y cuyo pase lo mandó Gameiro al fondo de la red.
Para más pesar del Barcelona, apenas diez minutos después, en el 33, Rodrigo Moreno asestó un nuevo mazazo al perdido equipo de Valverde con el 0-2, al cabecear un perfecto centro de Carlos Soler, lo que hundió aún más a un conjunto azulgrana desconcentrado e impotente para llevar peligro a la meta de Jaume Domènech.
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