Barcelona tuvo que emitir un comunicado ofreciéndole disculpas públicas a Real Madrid, por una acción en el clásico entre ambos equipos este fin de semana en Perelada (Barcelona) que sirvió de lección para a los pequeños jugadores de ambos equipos.
Barcelona había visto caer su valla con un gol de Real Madrid y todos sus jugadores, incluido el portero, fueron a celebrarlo sobre el campo de los catalanes. Sobre el acto un jugador culé tomó el balón lo llevó la centro del campo y reinició el juego para dirigirse hasta el área rival y marcar con el arco vacío.
Los jugadores del Real Madrid se percataron de la jugada mientras volvían a su campo y miraban al árbitro para saber si cobraría el gol de Barcelona, pero este nunca lo validó. Posteriormente Barça no dudó en disculparse. A la vez, el propio jugador también pidió perdón y aprendió de la experiencia.
Real Madrid, por su parte, aceptó las disculpas y agradeció el gesto del Barcelona, restándole importancia. Al final, fue una acción que no trascendió más allá, pero que demuestra que en la cantera azulgrana no sólo se forjan futbolistas, sino que se le da vital importancia a la formación humana.