Los hinchas de Barcelona, y los jugadores del cuadro catalan siguen echando espuma por el polémico arbitraje de Fernández Borbalán en la victoria del Athletic (2-1) sobre el cuadro azulgrana por la Copa del Rey. Quien no se pudo aguantar la bronca fue Gerard Piqué que cuestionó al colegiado y por lo cual podría ser sancionado.
El zaguero de Barcelona habló en caliente a su salida del 'San Mamés' y no perdonó los dos penales que el juez no sentenció y la una tarjeta roja contra Aduriz. "El penalti a Neymar ha sido clarísimo y el que me ha hecho Gorka a mí, también. Pero ya sabemos cómo funciona ésto. Ya vimos lo que pasó ayer en el Sevilla-Madrid... en la línea de los últimos tiempos. Nosotros queremos jugar a fútbol y no a la ruleta, que es lo que provocan estos arbitrajes", dijo Gerard Piqué.
Ahora el número 'Tres' de Barcelona podría afrontar un severa sanción luego que el Comité Técnico de Árbitros analice este lunes las palabras de Gerard Piqué para decidir si son suceptibles de ser denunciadas y sujetas a una sanción ejemplar.
Caso distinto será con la jugada donde Aduriz lanzó un manotazo sobre el cuello de Umtiti, que no fue observado Fernández Borbalán y que quedó impune.