Si Maluma está enamorado de ‘Cuatro Babys’, el hincha de Alianza Lima se enamoró con cuatro goles. Y si Maluma no sabe con cuál quedarse, el aficionado blanquiazul tampoco. Porque todos formaron parte del sueño cumplido de Kevin Quevedo. Que imaginó anotar en Matute, que ‘Sur’ lo aplauda, las cámaras lo enfoquen, las portadas lo esperen y la felicidad lo abrace. Todo es realidad, existe y quedará en la historia del joven de 20 años, que marcó un póker en el 7-2 ante Juan Aurich por el Grupo B del Torneo de Verano.
Pablo Bengoechea necesitaba un ‘9’ y lo encontró por triplicado, porque Kevin Quevedo y su camiseta ‘27’ fueron la sensación. En un esquema con tres defensores, el equipo maniató a un ‘Ciclón’ que sopló siete minutos. Luis Aguiar convirtió de penal (13’) y dobleteó con un tiro raso (23’). Pero la visita se puso respondona y Renzo Sheput descontó de pena máxima a los 27’. Luego, el hijo del superaliancista ‘Lalo’ Archimbaud, Jean Pierre, se disculpó con su padre por empatar de cabeza (34’). Luis Ramírez desniveló desde fuera del área a los 37’ y Quevedo arrancó su inolvidable tarde añadiendo un tiro de Alexis Cossio a los 44’. Y era solo el inicio.
LA ÚLTIMA DE QUEVEDO
El hincha victoriano jamás esperó lo que sus ojos le enseñaron: tres conquistas más de aquel muchacho que dejó la ‘U’ y se puso la camiseta que siempre quiso: la blanquiazul. Kevin Quevedo olfateó el gol, lo anticipó y estuvo presto para añadir un remate al poste de ‘Cachito’ a los 60’. La defensa roja estaba loca porque no sabía cómo encontrar al chico que entraba y salía del área, que iba por todos lados y por ninguno a la vez.
Porque como un fantasma apareció a los 71’ para cerrar por el segundo palo un tiro de Alejandro Hohberg. Once minutos después, repitió la acción luego de un disparo de Aldair Fuentes. Su sonrisa no tuvo fin, señaló la tribuna, se dejó abrazar por sus maduros compañeros y escuchó el cántico de la ‘Sur’ que estremece y emociona.
Y por allí sonará el ‘Cuatro Babys’. Y Kevin Quevedo bailará aún sin saber con cuál (de sus goles) quedarse.
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