Las voces que rompieron el silencio sobre el acoso sexual, entre ellas las primeras mujeres que destaparon el caso Harvey Weinstein y miles que les siguieron con el hashtag #MeToo, fueron nombradas 'Persona del Año 2017' por la revista estadounidense Time.
La revista puso este miércoles en su portada a la actriz Ashley Judd, la cantante Taylor Swift y a la exempleada de Uber Susan Fowler, quienes estuvieron entre las primeras en denunciar abusos sexuales, y en páginas interiores a una mujer con el rostro oculto, en referencia a quienes optaron por denunciar desde el anonimato.
"Las acciones audaces de las mujeres de nuestra portada junto a las de otras centenares, y también de muchos hombres, desencadenaron uno de los cambios más rápidos de nuestra cultura desde los años 1960", explicó el jefe de redacción de Time, Edward Felsenthal.
"Por haber revelado secretos a voces, por haber pasado de las redes de rumores a las redes sociales, por habernos obligado a todos a dejar de aceptar lo inaceptable, los que han roto el silencio son la persona del año", agregó al argumentar la decisión que este año optó por reconocer a quienes llamó "The Silence Breakers", en español, "las -o los- que rompieron el silencio".
"Los orígenes de este premio -identificar a la o las personas que han ejercido más influencia en los acontecimientos del año- residen en la teoría histórica del 'gran hombre', una expresión que nunca antes pareció tan anacrónica", estimó Felsenthal.
Este reconocimiento de la revista refleja la amplitud del movimiento que sacude a Estados Unidos y resuena en todo el mundo bajo las etiquetas #YoTambién, #Balancetonporc o #MoiAussi, entre muchas otras, desde las primeras acusaciones publicadas por The New York Times y el The New Yorker contra el todopoderoso productor de cine Harvey Weinstein a principios de octubre.
Desde entonces no pasa un día sin que alguna personalidad relevante sea acusada de acoso o abuso sexual. Muchas han sido despedidas o suspendidas de sus trabajos.
Hombres de las altas esferas políticas, del entretenimiento, de los medios y de la cultura han sido los acusados más notorios, pero las víctimas provienen de todos los sectores sociales, destacó Time.