El tradicional turrón de Doña Pepa, suavecito y rico, con su miel de frutas y grageas de colores, es uno de los productos más consumidos en octubre, el mes de las procesiones del Señor de los Milagros.
En la avenida Tacna y las calles adyacentes, especialmente en el cruce con el jirón Huancavelica, donde está el templo de Las Nazarenas, hay decenas de tiendas de turrones de distintas marcas, sabores y precios.
En varios distritos también existen panaderías donde los preparan con recetas propias, con algunos ingredientes adicionales que le dan un sabor, color y textura especiales.
* Turrones Isabel: Desde 1947, este pequeño local, ubicado en el jirón Áncash 448, viene endulzando la vida a miles de peruanos. No es tan empalagoso.
* Panadería Las Nazarenas: Tiene más de 60 años de historia y una fiel clientela que hace largas colas. Está en el jirón Huancavelica 431, Centro de Lima.
* Turrones San Martín: Su deliciosa miel es su principal encanto. Está a un costado de la plaza San Martín y se vende casi todo el año.
* Turrones Calderón: Lo prefieren por su sabor. La masa no se deshace con facilidad y su miel es suave. Se vende en diferentes locales, pero su fábrica está en Angélica Gamarra 599, Los Olivos.
* Turrones San José: Hay una palabra que lo identifica: ‘Suavecito’. Buen sabor y una miel especial lo caracterizan.
HISTORIA
Cuenta la leyenda que esta delicia nació gracias a un milagro del Cristo Moreno a fines del siglo XVII, cuando la esclava Josefa Marmanillo, ‘Doña Pepa’, empezó a sufrir una parálisis en los brazos, por lo que decidió encomendarse al Señor de los Milagros. Al ser curada, como ofrenda entregó un postre único que representaba la devoción del pueblo por el Cristo de Pachacamilla.
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