LA PISCINA DE LA CORRUPCIÓN. El actual alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, criticó a la exburgomaestre Susana Villarán, quien recientemente fue captada nadando en su piscina, mientras cumple arresto domiciliario tras aceptar haber recibido dinero de Odebrecht y OAS para financiar sus campañas de ‘No a la revocatoria’.
“Como alcalde estoy preocupado porque está invadiendo espacio público. Todos los demás tiene un retiro menor, pero a esta señora (Susana Villarán) no le importa nada. Ha hecho su piscinón y se nota que ha hecho 15 metros de apropiación de playa de uso público para ella sola”, sostuvo López Aliaga.
El alcalde de Lima también reprobó que Villarán se encuentre disfrutando del verano, mientras que los limeños padecen por los contratos corruptos de la concesión de peajes que firmó con las corruptas constructoras brasileñas Odebrecht y OAS.
“Pese a la indignación que genera la funcionaria Susana Villarán, bañándose en la piscina de la corrupción, manchada con la sangre de nuestros hermanos, espero que el TC atienda los derechos de un pueblo vulnerable”, manifestó el también excandidato presidencial.
López Aliaga tambén indicó que el contrato de concesión de peaje no fue revisado por la ex alcaldesa de Lima, Susana Villarán.
“Dos organizaciones criminales han venido al Perú han coimeado, una es Odebrecht y la otra es OAS, de Línea Amarilla”, mencionó.
“Un peaje para que la señora Villarán esté en la playa, a vista y paciencia de todo el mundo, de una Fiscalía corrupta y de un ente que debería velar por los intereses del Estado, como lo es la Procuraduría”, cuestionó.
Cabe recordar que la exalcaldesa de Lima Susana Villarán fue captada disfrutando del sol y la piscina en su casa de playa en Lurín, a pesar de los problemas legales que enfrenta por el caso Odebrecht y OAS.
Esta información fue revelada por el dominical Panorama, que llegó hasta los exteriores de la residencia de Villarán -quien abandonó la prisión en 2020 y cumple arresto domiciliario- esperando un posible allanamiento por parte de la Fiscalía, que intervino la casa de Carlos Juscamaita, exfuncionario de la Municipalidad de Lima.
En 2019, la exburgomaestre aceptó haber recibido dinero de Odebrecht y OAS para financiar sus campañas de ‘No a la revocatoria’ y de reelección a la alcaldía de Lima. Según la Fiscalía, a cambio de este dinero cedió a las empresas la concesión de los controvertidos peajes de Rutas de Lima y Línea Amarilla.
De acuerdo con la investigación fiscal, estas compañías entregaron US$10 millones a Villarán para mantenerse en el cargo.
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