
La presidenta de la República, Dina Boluarte, enfrenta una nueva denuncia constitucional que podría tener graves consecuencias políticas. Esta vez, los congresistas Carlos Zeballos (Bloque Democrático Popular), Susel Paredes y Sigrid Bazán la acusan de haber abandonado el cargo y omitido sus funciones al someterse a una serie de cirugías estéticas sin informar oficialmente al Congreso ni activar la sucesión presidencial.
La denuncia fue presentada el lunes 5 de mayo, un día después de que el médico cirujano plástico Mario Cabani revelara en televisión nacional que operó a la mandataria los días 28 y 29 de junio de 2023. Según su testimonio, se trató de una rinoplastia con septoplastia funcional, una blefaroplastia inferior, injertos grasos en el rostro y la colocación de hilos tensores.
Las declaraciones del cirujano encendieron las alertas en el Congreso. Cabani aseguró que la presidenta estuvo sedada y en recuperación durante varios días, con indicación médica de guardar reposo por al menos diez días. Sin embargo, en ese mismo período, Dina Boluarte habría firmado decretos supremos como el N.° 144-2023-EF y el N.° 017-2023-SA, lo que los legisladores consideran incompatible con su estado de salud.
Los denunciantes sostienen que la presidenta no estaba en condiciones de ejercer funciones y que debió informar al Congreso, tal como indica el artículo 115 de la Constitución, que regula el mecanismo de sucesión en caso de ausencia temporal o permanente del jefe de Estado.

¿QUIÉN FIRMÓ LOS DOCUMENTOS OFICIALES?
Una de las dudas más preocupantes es la validez de los decretos firmados mientras la presidenta se encontraba, según el médico, sin capacidad de valerse por sí misma. En esa línea, ha salido a la luz que la propia asistente presidencial, Patricia Muriano, habría admitido que algunas normas se aprobaron con firmas que no serían de la mandataria.
Si se comprueba que alguien firmó en su nombre, se estaría ante un presunto caso de suplantación de identidad o falsificación de documentos públicos, lo que agravaría la situación legal del entorno presidencial.
La denuncia también menciona una posible relación entre el entorno médico de Dina Boluarte y ciertos nombramientos en entidades públicas como EsSalud y Sedapal. Si bien el doctor Cabani no negó sus vínculos con personas cercanas a la presidenta, tampoco se ha confirmado que haya recibido beneficios a cambio de los procedimientos estéticos.
En paralelo, otros médicos que participaron en las cirugías han comenzado a declarar ante la Fiscalía. Se espera que en los próximos días también brinden su testimonio las enfermeras que asistieron en la intervención.

¿QUÉ DIJO CABANI?
Durante semanas, el Gobierno intentó minimizar el hecho, asegurando que se trató de una “intervención ambulatoria”. No obstante, la versión de Mario Cabani contradice esa narrativa. “No fue una operación menor, como sacarse una muela. Ella estaba sedada, no se podía mover ni sentar por sí sola”, afirmó el cirujano en una entrevista con Cuarto Poder.
La presidenta Boluarte, por ahora, guarda silencio. Mientras tanto, la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales del Congreso deberá evaluar la denuncia y decidir si inicia una investigación formal.
Cabe recordar que esta no es la única denuncia que enfrenta la jefa de Estado. Según la fiscal de la Nación, Delia Espinoza, ya existen 34 denuncias presentadas por ciudadanos en su contra, además de una anterior por el mismo tema presentada en diciembre de 2024 por la congresista Margot Palacios.
¿Avanzará esta nueva denuncia? ¿Hubo realmente abandono del cargo? El caso recién comienza.
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