INDIGNANTE. Agentes de la División de Alta Tecnología de la Policía Nacional del Perú (PNP) y la Fiscalía detuvieron en Villa María del Triunfo a una pareja de esposos por, presuntamente pertenecer a una banda criminal dedicada a la pedofilia. Además, se rescató a cinco menores, dos de los cuales serían hijos de los detenidos, los cuales habrían sido filmados ilegalmente.
El operativo se llevó a cabo durante la madrugada de ayer en dos viviendas, ubicadas en el cruce de las calles Alfonso Ugarte y Rodríguez de Mendoza, en la zona conocida como Vallecito Alto.
Luis Huamán Santa María, coronel de la PNP y encargado de la intervención, precisó que se apresó a Miguel Ángel Rubio Alvarado, alias ‘Loco Ángel’ y su cónyuge Flor María Páez, de 34 años. A ellos se les encontró 84 imágenes y videos de material de abuso sexual infantil, al parecer, de allegados a su propia familia.
“También investigaciones preliminares indican que estas personas captaban menores de la calle para filmarlos y luego distribuirlos a nivel internacional. Se incautó prendas íntimas, sábanas, muñecos y suficientes elementos para ser imputados por el delito de pornografía infantil”, sostuvo Huamán Santa María.
Añadió que se incautaron celulares que servirán para determinar a qué grupo o personas se le enviaba el material pornográfico.
La pareja ocupaba dos viviendas en el sector de Vallecito Alto, desde donde habrían utilizado niños de su entorno familiar y niños de la calle para realizar grabaciones de contenido pornográfico.
Sobre los niños encontrados, todos menores de diez años, el alto mando de la Policía precisó que se determinará cuál es el real parentesco con los implicados, pues trascendió que dos de ellos podrían ser sus hijos.
Segundos antes de ser detenida y para no hallar pruebas en su contra, la pareja de ‘Loco Ángel’ arrojó un celular a un balde de agua, el cual fue recuperado rápidamente por la Policía Nacional. Cabe precisar que Miguel Ángel Rubio Alvarado tenía antecedentes por violación sexual, pues fue denunciado por ese delito en 2018.
La pareja detenida enfrenta acusaciones graves, incluyendo los delitos de pornografía infantil y distribución de material pornográfico, que pueden ser penados hasta con 15 años de cárcel efectiva.
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