Una tarde de caos se vivió en Surquillo, cuando un patrullero de la Policía Nacional del Perú (PNP) causó un accidente de tránsito y, en lugar de detenerse, huyó del lugar. El impacto, ocurrido en la calle Las Águilas, dejó un vehículo particular gravemente dañado, mientras el conductor del patrullero no asumió responsabilidad por los hechos.
Según relató Javier, propietario del automóvil afectado, el suboficial Mario de la Cruz fue el conductor del patrullero que colisionó con su vehículo y continuó su camino. Las cámaras de seguridad de la zona grabaron el momento exacto en que el patrullero golpeó el coche y no se detuvo para brindar ayuda.
Tras el incidente, Javier, que en ese momento paseaba a su mascota, se dirigió al complejo policial Aramburú, donde logró identificar el patrullero involucrado en el accidente. Al confrontar al suboficial, este reconoció haber causado el choque y justificó su acción alegando que se había quedado dormido al volante.
Sin embargo, lo más sorprendente fue la propuesta del policía. De la Cruz, cuyo patrullero está asignado a la comisaría de La Huayrona (San Juan de Lurigancho), ofreció pagar los daños directamente para evitar que se realizara la denuncia formal, proponiendo que el vehículo fuera reparado en un taller particular. Javier, desconfiado de que el suboficial cumpliera su palabra, rechazó la oferta y decidió seguir adelante con el proceso legal.
Los daños al automóvil fueron estimados en más de S/10 000, debido a los fuertes impactos en la parte delantera, que incluyen la deformación del chasis. El vehículo, que Javier usa para trabajar y trasladar a su familia, quedó inhabilitado para circular, lo que lo obligó a contratar una grúa para trasladarlo a un peritaje en Santa Anita, cuyo costo asciende a S/600, sumando así gastos adicionales.
Pero el problema no terminó ahí. Javier denunció que recibió llamadas de personas cercanas al suboficial, quienes le pedían que anulara la denuncia, advirtiéndole que podría hacerle daño a la carrera del policía. A pesar de estas presiones, el afectado decidió no ceder y mantuvo su denuncia ante la Comisaría de Surquillo.
Hasta el momento, la Policía Nacional no ha emitido un comunicado oficial sobre el incidente ni sobre el comportamiento del suboficial De la Cruz. La denuncia sigue en curso y Javier espera que se haga justicia, pidiendo que las autoridades asuman su responsabilidad en este caso.
La situación ha generado indignación, pues no solo se trata de un accidente común, sino de la acción de un funcionario público que, en lugar de cumplir con su deber, intentó eludir las consecuencias del siniestro.
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