El padre de familia, Brayan Andrés Cornejo Rodríguez (25), fue asesinado de un certero balazo en la frente por un menor de 16 años, apodado ‘Lukita’, quien lo tenía amenazado por una pelea que sostuvieron el fin de semana pasado, en San Juan de Lurigancho.
El joven estaba llegando a casa de sus familiares cuando fue interceptado por siete sujetos entre los pasajes Loreto y Huacho, en Caja de Agua. Fue ‘Lukita’ quien sacó el arma y le disparó. El joven murió instantáneamente. Todo se remonta al último fin de semana cuando ambos sostuvieron un pleito. Brayan Cornejo estaba tomando una gaseosa con sus amigos y le chocó casualmente a ‘Lukita’, que tiene 16 años. Esto no solo originó una fuerte discusión entre ambos sino que de los insultos pasaron a los golpes.
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Brayan cornejo le cortó el dedo a ‘Lukita’ y este juró vengarse. No pasaron ni dos días y esa venganza la hizo realidad. La tarde del lunes, Brayan Cornejo Rodríguez, quien se dedicaba a la venta de mascarillas, tuvo un percance y los serenos le decomisaron su mercadería. Le dijo a su pareja que iban a regresar a su casa, pero él cambió de opinión a último momento y le dijo que vaya sola porque él se iba a la casa de sus familiares.
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El temible menor se enteró que su rival estaba solo en su barrio y fue con su banda para cobrar venganza. Cuando Brayan Andrés Cornejo, llegó al barrio de sus familiares, y fue atacado, irónicamente a unos metros de la casa de sus parientes.
El autor del disparo y sus cómplices salieron del lugar y escaparon sorteando los autos de la avenida. La víctima trabajaba con su pareja vendiendo mascarillas y deja un hijo de 8 años en la orfandad.
A la escena llegaron primero los policías de la comisaría de Caja de Agua y luego Depincri San Juan de Lurigancho 2 con los peritos de criminalística, quienes cercaron la zona y realizaron las diligencias de rigor. Horas más tarde, el joven padre de familia, fue trasladado a la Morgue de Lima para ser sometido a la necropsia de ley.
La delincuencia sigue imparable. El valeroso policía Junior Julinho Dávila Chanchari (25) se enfrentó a un delincuente armado, para tratar de impedir que asalten un conocido chifa en Campoy, y terminó asesinado de un balazo en la cabeza, en San Juan de Lurigancho.
El agente, que prestaba servicio en la comisaría de Huachipa, había ido a cenar con una bella jovencita al chifa ‘Los Cipreses’, ubicado en avenida Principal mz. L lote 3 B en Campoy. Ellos se sentaron en una mesita afuera del local. Estaban conversando mientras esperaban que los atiendan.
De pronto, a las 8:39 de la noche, un auto gris se detuvo frente al local de comida oriental y tres sujetos bajaron en forma sospechosa. El hampón, que vestía una bermuda jean color, casaca negra, zapatillas blancas y gorra roja, ingresó primero y encañonó a la parejita, que estaban a solo unos metros de la puerta principal.
El asaltante le robó el celular al joven policía, pero cuando intentó robarle su mochila, que estaba enganchada a la silla, el joven agente se llevó la mano a la cintura, para sacar su arma, e intentó pararse para evitar el atraco, y fue herido de un balazo en la cabeza.
El ladrón le gritó a sus cómplices, que estaban asaltando a los comensales en el salón: “¡Es un policía!”. Al verlo ensangrentado en el piso, le robaron su pistola al agente, que precisamente estaba de franco. Los otros dos rateros salieron corriendo y juntos salieron del recinto y huyeron en el mismo auto, que los esperaba a unos metros del lugar.
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