La organización criminal que controla el negocio de la adulteración de las tarjetas del Metro de Lima para aumentar los saldos de las mismas y cobrar a las personas por el ingreso habrían acumulado ya ganancias por más de 28 millones de soles y contarían con la colaboración de trabajadores de la propia Línea 1, quienes se encargan de brindar los códigos necesarios para efectuar el fraude.
“Hemos tenido información de que personas que laboran en el departamento informático de la Línea 1 están proporcionando los códigos para que los delincuentes puedan recargar saldos ficticios”, señaló el coronel Luis Huamán Santamaría, jefe de la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología (Divindat), en un reportaje de ‘Día D’.
Según el informe, esto ha ocurrido de manera continua durante los últimos 4 años, involucrando a trabajadores de la Línea1, pero a pesar de las evidencias contundentes, la empresa responsable no ha tomado medidas para solucionar esta preocupante situación.
“Todas las intervenciones que hemos tenido, hemos hecho conocer a los representantes de la Línea1, para que acudan a la Divindat y tengan conocimiento que su sistema está vulnerado; sin embargo, ningún representante se ha presentado para hacer su descargo”, añadió el coronel Huamán.
De acuerdo con el reportaje, cada miembro de la banda con tarjetas recargadas con saldo adulterado puede ganar hasta 300 soles por hora, lo que multiplicado puede dar mucho dinero suficiente como para comprar funcionarios de altos rangos que prefieren no investigar.
Los informes policiales dan cuenta de que el aplicativo llamado Mifare Classic Tool (MTC), que se puede encontrar libremente en el Play Store, es el que usan la bandas criminales para modificar fácilmente los saldos de las tarjetas de la Línea 1.
“Es fácil que una persona que tenga el mínimo conocimiento de informática, con un tutorial, lo puede hacer, lo que es difícil es conseguir los códigos, que son brindados por esta gente del área de informática, cosa que facilita la alteración de dicha tarjeta”, sostuvo el jefe de la Divindat.
De acuerdo con el contrato suscrito entre el Estado peruano y la empresas Graña y Montero Ferrovías, a cargo de la Línea 1, se establece que el nivel de servicio que deben alcanzar para evitar penalizaciones es de un máximo del 8% de fraude.
Y, según el Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositran), las pérdidas millonarias ocasionadas por estas mafias representan menos del 8% del total recaudado. Esta cifra aparentemente baja en papel, pero no monetariamente, ha sido citada como la justificación por la cual el Ministerio de Transporte y Comunicaciones no ha implementado cambios en el sistema.
“Se debe actualizar el sistema, porque el sistema ya esta vulnerado... Como este es un sistema que el Estado está subsidiando, el Estado va tener que pagar más de cofinanciamiento”, precisó Francisco Jaramillo, gerente de supervisión y fiscalización de Ositran.
Las autoridades policiales capturaron la semana pasada a cuatro integrantes de la banda criminal ‘Los Tarjeteros’, la cual adulteraba tarjetas de la Línea 1 del Metro de Lima para obtener jugosas ganancias. La detención se produjo en la estación Atocongo.
A los cuatro delincuentes se les encontró 61 tarjetas de la Línea 1 adulteradas, con saldos que van desde los 10 céntimos hasta los 900 soles. Además, cada una de las piezas estaba modificada fraudulentamente.
De acuerdo con la Autoridad de Transporte Urbano (ATU), desde el 2018 hasta el 2022 se han reportado pérdidas cercanas a los 28 millones de soles, a causa de estas mafias.
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