Jhon Bardales, de 37 años, perdió la vida trágicamente en Manchay cuando sicarios le dispararon cuatro veces mientras conducía una motocicleta. Bardales era perseguido por dos delincuentes, quienes lo seguían de cerca hasta que perdió el control de su motocicleta y cayó sobre la berma central.
A pesar de estar herido, pero aun con vida, la víctima hizo un intento por moverse, pero los sicarios decidieron dar la vuelta y regresar para asegurarse de cumplir con su objetivo, acabando con su vida mientras yacía en el suelo.
Bardales, había iniciado su carrera universitaria de Ingeniería Civil y con varios años de experiencia en topografía, tenía planes de salir con su esposa cuando ella recibió la trágica llamada del serenazgo que le comunicaba la terrible noticia.
Bardales encontró un destino similar al del ingeniero Evaristo Lino, de 31 años, quien también fue asesinado de la misma manera. Ambos habían colaborado en proyectos conjuntos anteriormente. Lino había estado recibiendo amenazas por parte de traficantes de terrenos.
La trágica pérdida de la vida de ambos deja a sus hijos pequeños en una situación de orfandad. Los familiares de Bardales y Lino mantienen la esperanza de que la policía logre capturar a los responsables de estos actos delictivos, de modo que puedan enfrentar las consecuencias por el terrible daño que han ocasionado.
Contenido GEC