MURIÓ EN SU LEY. El feroz delincuente venezolano, ‘Maldito Cris’, Christopher Joseph Fuentes Gonzales (24), quien era buscado intensamente por la muerte de un sereno de Surco, murió en un enfrentamiento a balazos contra la policía la tarde del viernes 16 de junio, a la altura de la cuadra 33 de la avenida Universitaria, en el distrito de San Martín de Porres.
Agentes de la división de Secuestros de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) y efectivos de la Sub Unidad de Acciones Tácticas (Suat) no dudaron en enfrentarse a tiros contra Cris, acabando con su vida y capturando a dos de sus cómplices. Ocurrió en el frontis del hostal El Amanecer
En el enfrentamiento contra Maldito Cris, dos policías resultaron heridos. Ellos fueron auxiliados y trasladados a un centro médico cercano.
Fuentes policiales precisaron que el venezolano se encontraba armado con una pistola automática, que fue encontrada a pocos metros del cuerpo del hampón.
Durante la intervención policial, un agente de la Unidad de Desactivación de explosivos (UDEX) inspeccionó al fallecido, encontrando en su morral tres pistolas. Sumada a la que tenía dio un total de cuatro armas de fuego.
Carlos Bruce, el alcalde de Surco, se pronunció luego de la muerte de Christopher Joseph Fuentes González de 24 años, más conocido en el mundo del hampa como ‘Maldito Cris’. El rankeado delincuente venezolano fue abatido en un enfrentamiento con la policía a varios meses de haber asesinado a un sereno del mencionado distrito.
Maldito Cris era buscado intensamente por la policía por la muerte del sereno de Surco Luis Manrique Pizarro (55), ‘Chavito’, en un asalto en dicho distrito. El terrible crimen quedó grabado en video y transmitido para todo el país.
Por la ferocidad del hampón, las autoridades habían ofrecido una recompensa de hasta 130 mil soles por información que sirva para la captura de ‘Maldito Cris’, Christopher Joseph Fuentes Gonzales (24).
Enterado que la policía de Lima se encontraba tras sus pasos, Maldito Cris se había ido hasta Huaral para seguir cometiendo sus robos; sin embargo habría decidido volver a Lima en busca de otro jugoso motín, sin imaginar que los agentes del orden ya se encontraban listos para enfrentarlo.
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