Cadena perpetua pidió la familia de , quien le cortó el cuello y le reventó la cabeza con una piedra en plena calle, tras sacarla a empellones de una discoteca, en Cajamarca.

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El confeso criminal, exenamorado de la víctima, fue capturado por un sereno. “Es un cobarde, les pegaba a las mujeres, un maldito”, expresó el angustiado padre de Mirley, quien vivía en Chiclayo, pero trabajaba en Cajamarca.

“Esa bestia debe pudrirse en la cárcel. Merece la muerte. Lo que ha hecho no tiene nombre”, manifestó otra familiar de Mirley en Chiclayo, donde velaban sus ropas.

El espantoso homicidio ocurrió a las 3 de la madrugada en la cuadra 17 de la avenida Alfonso Ugarte, en Cajamarca. Mirley, vendedora de aros para ganado, estaba con sus amigas cuando llegó Alex Quezada, quien la sacó con violencia del local. Allí discutieron porque ella, madre de tres niños de 10, 12 y 14 años, no quería regresar con él.

‘SI NO ES MÍA...’

Furioso, rompió una botella y le hizo varios cortes en el cuello. Luego agarró una piedra grande y le aplastó la cabeza, fracturándole la región frontal con exposición de masa encefálica. Todo fue grabado por una vecina que pedía auxilio a gritos. “Si no es mía, no será de nadie”, le dijo.

La Policía llegó y al hallarla con vida la llevó al Hospital Regional de Cajamarca, pero murió. De forma rápida se ubicó al asesino en la cuadra 3 del jirón Tiwinza. Se resistió y fue reducido. Aceptó haber matado a Mirley y fue denunciado por feminicidio.

Quezada está detenido en el Depincri. Enfrenta cuatro denuncias y tenía una medida de alejamiento de la víctima. Estuvo preso en el penal de Cajamarca del 2016 al 2019 por robo agravado en banda y tiene amplio prontuario.

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