Una menor de 17 años fue brutalmente golpeada en el Callao. Ella se encontraba en un bus junto a su padre cuando un sujeto invadió su asiento con sus brazos. Por esa razón, le pidió que no la moleste sin imaginar lo que le pasaría.
Seguidamente, el hombre -que estaba en aparente estado de ebriedad- le lanzó un puñete en el rostro a la muchacha, lo que le rompió los lentes y le provocó cortes en la zona del ojo.
Asimismo, el padre de la joven, quien iba con ella en el transporte pública también fue agredido por tratar de defenderla. Con la ayuda de las personas, el señor pudo detener al sujeto hasta la llegada de la Policía Nacional del Perú.
“Le ha hecho varios cortes en el ojo, en el párpado hay un pequeño orificio, hay carne que ha salido desprendida, que si el hombre, no sé, (aplica) más fuerza, le dañaba totalmente el ojo. Al oír el grito de mi hija y la sangre que le brotaba, lo que hago es cubrirla y sacarla de la unidad”, expresó el papá en Panamericana TV.
Cuando llegó la PNP, el padre aseguró que quedó totalmente indignado cuando se percató que a su hija la llevaron en el mismo patrullero que trasladaron a al sujeto que la agredió.
“Me dicen, vaya usted a la comisaría de Monserrat, a la que yo me acerco, llego y mi hija no estaba. La habían llevado al hospital Loayza sola, en ningún momento me dijeron ‘vamos con usted también”, indicó.
Finalmente, el hombre identificado como Julio Sandoval Indoñán fue liberado pese a la denuncia que hubo en su contra.
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