Ha pasado casi un día desde el derrumbe en la quinta Virgen de Fátima, ubicada en Girón La Mar 161, en Barrios Altos, Lima. Dos viviendas colapsaron, dejando a 38 familias en una situación crítica, con sus hogares prácticamente destruidos, según los vecinos.
La Municipalidad de Lima ha colocado soportes preventivos para evitar más colapsos, pero los afectados denuncian la falta de ayuda adicional. La noche ha sido especialmente difícil para estas familias, muchas de las cuales han tenido que dormir a la intemperie en medio del frío invernal, ya que la municipalidad no les ha proporcionado ni siquiera una carpa.
Un vecino, cuya vivienda también resultó dañada, expresó que ni Defensa Civil ha intervenido. Los afectados claman por asistencia básica, incluyendo refugio temporal, alimentos y ropa de abrigo.
Israel, uno de los residentes más perjudicados, comentó que su casa es una de las más deterioradas. “El derrumbe ocurrió ayer a las 8:30 de la mañana. Han puesto soportes, pero no hemos recibido más ayuda”, señaló. También mencionó que en la quinta viven personas mayores y niños que están en peligro debido a la estructura inestable.
Otra vecina dijo que han tenido que improvisar con lo poco que pudieron salvar de sus hogares. “Nos han puesto una cinta de peligro, pero no nos dejan entrar porque es muy arriesgado. Ni siquiera podemos cuidar nuestras pertenencias”, afirmó.
La situación es crítica y los vecinos piden urgentemente a las autoridades que les brinden ayuda inmediata. “Necesitamos carpas, alimentos y ropa. La municipalidad ha hecho muy poco por nosotros”, enfatizó otra de las afectadas.
Estas antiguas casonas representan un riesgo significativo para sus habitantes. Las 38 familias de la quinta Virgen de Fátima solicitan una solución antes de que ocurra una tragedia mayor.
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