Por: Fernando 'Vocha' Dávila
A este veterinario, los animales le importan y también la vida. Caminante de jirones bravos y olas inmensas. El doctor Pancho Cavero es dueño de una historia singular, de tener todo y aprender de los que tienen menos. Conozca un poco al ‘pituco’ callejero y ahora famoso.
Pancho, tienes una cita con una chica, ¿con qué actitud vas?
La de un delfín.
¿Por qué lo eliges?
Tienen una gran actitud. Se dan saltos mortales y muestran una cara sonriente.
¿Sano o de barrio?
He tomado en el jirón Parinacochas, en La Victoria, y jugado el ‘Mundialito de El Porvenir’.
¿Tu puesto?
Delantero.
¿Tu chapa?
Lonchera de perro o Tortuga calata.
¿Otra?
Lady Diana.
¿Y eso?
Estudié en el colegio Markham y en la Universidad de San Marcos. El día de la fiesta de ‘Cachimbos’, me aparecí con una casaca de mi colegio que lucía la bandera de Inglaterra y allí nació el apodo.
¡Qué tal cambio social!
En mi ‘uni’ me consideraban ‘pituco’ y en el barrio ‘terruco’, je, je.
¿Hicieron hora contigo?
En la escuela me llamaban Cavero, los amigos Francisco, pero allí era Pancho. Odiaba que me digan así, pero me acostumbré y ahora me encanta.
¿Eso quiere decir...?
Vivía en una burbuja, que era linda, pero aprendí a conocer realmente el Perú.
¿Una anécdota?
Salíamos con los compañeros al Centro de Lima y como yo no conocía, ellos me dejaban solo para que me pierda.
¿Te metías tus tragos?
Veterinario puede morir de hambre, pero no de sed.
¿Tu trago preferido?
El ron Pampero.
¿‘Chancón’?
Hábil.
¿Ingresaste a la primera?
A la segunda.
¿Tu primer día en la facultad?
Fui con mi papá, estaba tomada por los estudiantes y llena de pintas.
Manejabas tu billete, ¿ganador con las ‘bebés’?
Nunca fui mujeriego.
¿Ni lo intentaste?
Lo mío era pasarla bien, organizar los tonos. Llevaba mi camioneta llena de trago.
¿Una mascota ayuda a conocer amigas?
Sí. Te ven y te hablan: qué lindo, qué bacán.
¿Te siguen las damas?
Por mi trato con los animales me elogian: es el hombre perfecto. En mis redes sociales, el 65% son seguidoras.
Estás solo, ¿te entra el bichito de ‘tirar maicito’?
No, ya tengo 46 años y no estoy para creérmela.
¿Puñetero?
Una vez, en una fiesta sanmarquina, entró un borracho, se portó mal, lo paré y me cortó la nariz con una gillete.
¿Una locura?
Aseguran que estoy loco porque hablo con los animales.
¿Es cierto?
Converso y les pido consejos.
Cuéntame alguno...
Una vez, a las 4 de la mañana, alisté mis cosas para correr olas y mi gato me dio una mirada, entendí que no debía ir. El animalito estuvo feliz todo el día.
Otro caso.
En una ocasión se me olvidó la llave de la casa. Entonces trepé mi reja para entrar y mi perro Mac me quería morder.
¿No te reconocía?
No y se me quería tirar encima. Decidí regalarlo y cuando lo vinieron a recoger, no te imaginas.
¿Qué sucedió?
Me puso la pata en mi brazo. Sentí su mensaje: tranquilo, chibolo, voy a estar bien.
¿Por qué es importante saber de la fauna?
Las enfermedades más terribles de la humanidad han venido de los animales.
Tu profesión es hermosa, pero a la vez peligrosa.
Es la carrera donde hay más suicidios.
¿Te deprimes cuando se te muere un paciente?
Sí. Si soy el que puede todo en televisión, cómo se me pudo ir.
¿Algo que te incomode?
Me traen cachorritos, te empiezan a grabar y piden que lo cures gratis. Así como ellos, yo también tengo familia y quienes trabajan conmigo igual.
¿A quién llaman ‘Flojera de perro’?
Al que se echa y duerme en cualquier lado. No se pone de pie, por nada.
Está bien lanzar un piropo: ‘Guapa, pareces una gata’.
Es animalizarla.
Si has jugado el ‘Mundialito’, debes ser hincha de un equipo.
De la ‘U’.
¿Un ídolo?
El ‘Puma’ y también era ‘Chemo’, pero se me desinfló cuando se fue a otro club.
¿Tu gran gesto?
Cuando sucedió el terremoto de Pisco, veía las desgracias y animalitos sufriendo entre los escombros.
¿Qué decisión tomaste?
Llevé mis sillas de ruedas para las mascotas.
¿Y cómo nacieron tus marchas caninas?
Cuando lo atropellaron a mi hermano. Un chofer borracho, manejando combi, lo mató y se dio a la fuga.
¿Qué se te vino a la mente?
Organicé una marcha que se llamó ‘Terrorismo vial’. Tuvo muy buena aceptación y de allí me prometí: ahora lo haré a favor de ‘nuestros hermanos menores’.
¿Cuál es tu gran proyecto?
Mi plataforma digital ‘Go vet’. Es una especie de ‘Animal Planet’.
Gracias porque nos dejaste descubrir ese perfil tuyo que casi nadie conoce.
Debo darles un apretón de manos porque ahora las personas sabrán más de mí y eso es muy bueno. Como siempre, el agradecimiento especial al Trome.
Se quedó en su clínica del cono sur, se abrazó a una perrita que llegó a ser atendida y le lamió su mejilla y las dueñas sonrieron. Este tipo da y recibe cariño. Alguna vez Martin Luther King filosofó sobre la necesidad de encontrar personas como el ‘doc’. “Hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces, pero no hemos aprendido el arte de vivir juntos, como hermanos’.