EL PERÚ SIGUE ARDIENDO. El Ministerio de Salud (Minsa), a través del Centro de Operaciones de Emergencias (COE Salud), reportó que el número de personas fallecidas producto de los incendios forestales que se registran en diferentes regiones del país se ha elevado a quince, mientras que hay 114 con diversos daños a la salud.
Mediante un comunicado, el Minsa añadió que del total de personas con problemas de salud, seis han sido hospitalizadas, mientras que 128 pobladores han sido dados de alta luego de recibir atención médica.
Por otro lado, el sector recalcó que la Dirección General del Riesgo de Desastres (Digerd) ha movilizado 65 profesionales de la salud, 59 brigadistas de intervención inicial, 22 técnicos especialistas y 25 ambulancias a las zonas afectadas.
Asimismo, el Minsa menciona que “se ha intensificado los espacios de Monitoreo de Emergencias y Desastres de las Direcciones y Gerencias Regionales de Salud en todo el país”.
Cabe mencionar que las regiones con mayor prioridad son: Lambayeque, Áncash, Junín, Amazonas, Cusco, Cajamarca, Apurímac, Huancavelica, La Libertad, Arequipa, Ayacucho y Pasco.
Cabe mencionar que el ministro de Salud, César Vásquez, señaló en conferencia de prensa que la decisión de declarar un estado de emergencia depende de los indicadores técnicos que se están evaluando actualmente. Asimismo, señaló que dicha declaratoria permitirá que se destinen más recursos para combatir los incendios.
“La decisión de declarar en emergencia depende mucho de los indicadores que manejan técnicamente Indeci. Para eso ha ido la presidenta y está en reunión permanente con los órganos respectivos”, señaló.
“Si se declara en emergencia, obviamente, el país puede destinar el mayor recurso que se necesite para combatir estos incendios. Pero, estamos haciendo todos los esfuerzos, el gobierno no está cruzados de brazos”, agregó.
Uno de los principales llamados a la población es a que cese la práctica de la quema de pastizales, ya que gran parte de los incendios tienen origen humano.
Existen creencias erróneas de que incendiar los bosques durante épocas de sequía puede atraer la lluvia, lo cual ha sido desmentido por los expertos. Las autoridades han exhortado a los ciudadanos a ser más conscientes del daño que estas acciones provocan al medio ambiente y a sus propias comunidades.
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