Una madre de familia que intentó mejorar su aspecto físico sometiéndose a una operación de liposucción, acabó muerta al sobrevenirle un paro cardíaco fulminante al interior de la clínica, sus parientes aseguraron que hubo negligencia en la atención de su familiar. El hecho sucedió en Chimbote.
María Aquino Flores (52) ingresó a la clínica Santa María de Chimbote el lunes pasado para someterse a una abdominoplastía, es decir, una operación para retirarse la grasa del abdomen, la paciente salió bien de la intervención quirúrgica y permaneció en la clínica mientras se recuperaba.
Sin embargo la mañana del miércoles comenzó a sentir nauseas, para luego desvanecerse al sobrevenirle un paro cardiaco.
El personal intentó reanimarla de forma mecánica pero Aquino Flores no reaccionó.
Los familiares han denunciado ante la Fiscalía negligencia médica en la atención de su paciente. Por su parte el abogado del establecimiento médico rechazó una mala praxis y aseguró que el ataque cardíaco fue un hecho fortuito.