El ataque de Estados Unidos contra una base militar del régimen sirio provocó muertes. Esto lo confirmó esta noche el gobernador de Homs, provincia de Siria en donde se encuentra la base aérea.
"Hay mártires, pero no tenemos aún un balance ni para los mártires ni para los heridos. Hay heridos que recibieron quemaduras... hay incendios que intentamos controlar... tomará un poco de tiempo evaluar los daños", afirmó Talal Barazi, autoridad de esta jurisdicción en Siria tras la caída de los misiles de Estados Unidos.
"Por supuesto condenamos toda acción que apunte a las bases militares sirias es condenable. La Fuerza Aérea presente en el aeropuerto Shayrat constituye un apoyo importante a las fuerzas armadas en la batalla contra el grupo Estado Islámico (ISIS) en la región de Palmira", agregó el gobernador de Homs, Siria.
Palmira, situada en la provincia de Homs, está controlada actualmente por los yihadistas del grupo Estado Islámico luego de que en un primer momento esta provincia fuera uno de los puntos de resistencia de la rebelión contra el régimen de Bashar al-Asad en Siria.
Este ataque con decenas de misiles tomahawk es la primera acción bélica del gobierno de Donald Trump tras registrarse el ataque químico que dejó más de 80 muertos en Siria.