José Gómez, el dueño de la enorme casa de Punta Hermosa que está a punto de colapsar tras el paso de dos huaicos por el balnerario, se pronunció para América Noticias y contó cómo viene lidiando con la situación que lo dejó sin hogar.
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“Todavía no está inhabitable, nosotros no estamos usándola, yo estoy al frente y a mis hijos los he mandado a Lima. Estamos al frente en la casa de unos vecinos. Hemos limpiado, con ayuda de todos los vecinos de Punta Hermosa y de algunos voluntarios que han venido desde Lima. En cinco horas dejamos limpia la casa por dentro, el barro”, refirió para el mencionado medio.
En ese sentido, aseguró que todavía no habitará la vivienda hasta que la la alerta pase, aunque todos los días ingresa por las mañanas para limpiar junto con su esposa hasta las dos de la tarde.
“Es mi única casa, mi propiedad, yo vivo acá todo el año, es que que veraneo ni nada, yo vivo todo el año con mis hijos. Mi hijo estudia en Punta Negra, mi hija va ir al nido este año acá. Tenemos una vida acá”, indicó José Gómez.
Por otro lado, indicó que aunque el inmueble está remodelado, tiene una antiguedad de 70 años, cuando su padre y su abuelo se asentaron en Punta Hermosa hace varias décadas.
Finalmente, José Gómez aseguró que están a la espera de ver qué sucede en su distrito. “Es una espera que desespera. Acá lo que se necesita es una proyección de una obra grande, con concreto y rocas para encausar, desde la entrada de Punta Hermosa hasta la desembocadura, para que cuando venga el huaico no cause tanto daño”, acotó.
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