SALEN MÁS IMÁGENES. Día D difundió un profundo informe sobre el polémico caso de Gabriela Sevilla, la joven de 30 años que denunció haber sido secuestrada, golpeada y obligada a dar a luz para finalmente quitarle a su bebé. En la nota, su madre indicó que no tenía fecha de parto programada. “No sé muy bien de verdad, como ella ya es mayor, yo casi no invado mucho sus pasos”, dijo para el dominical de ATV.
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Además, confesó que luego de ser reportada la desaparición de su hija, el pasado miércoles 19 de octubre, recorrió todos los hospitales de la capital, incluido el Hospital Militar, y no pudo encontrarla. Sin embargo, horas después, durante la madrugada del viernes, fue vista ingresando al referido nosocomio con Gabriela.
Según el propio testimonio de Sevilla, luego que sus presuntos secuestradores la dejaran libre, llegó hasta la casa de su madrina en Villa María del Triunfo. Aseguró que tres hombres la secuestraron, golpearon y obligaron a parir, aunque no escuchó el llanto de la bebé porque había perdido el conocimiento.
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Gabriela Sevilla también rechazó que le siguieran practicando exámenes en el Hospital Militar mientras su padre se encontraba en los exteriores del nosocomio tomando un café, dice el referido medio.
El polémico caso de Gabriela Sevilla sigue arrojando más detalles. Esta vez, el dominical de Willax difundió imágenes exclusivas que la joven de 30 años habría enviado a sus famliares y pareja, para demostrar que había roto fuente la noche del pasado miércoles 19 de octubre, la misma en la que fue reportada su separación.
Todo comenzó a las 7:15 p.m. de la mencionada fecha, cuando la mujer, que aseguró haber sido secuestrada cuando estaba en labor de parto y que le robaron a su bebé recién nacida, salió de su casa en Surco rumbo a la Clínica Internacional de San Borja para dar a luz. Lo extraño es que fue sola, sin la companía de ningún familiar ni de su pareja, Ramiro Gálvez.
En el trayecto a la clínica, Gabriela Sevilla le mandó dos fotografías a sus familiares y a su novio, con las que quería probar que había roto la fuente. La primera es de un papel higiénico con rastros de sangre y la segunda es una imagen del piso con un líquido amarillento, teñido también de sangre.
Gabriela Sevilla envió fotos a sus familiares para probar que había entrado en labor de parto antes de ser supuestamente secuestrada
Toda la familia de la mujer se movilizó hasta la Clínica Internacional de San Borja para encontrarse con ella, pero Gabriela nunca llegó y apareció recién la madrugada del viernes 21, asegurando que había sido secuestrada, golpeada y le habían quitado a su bebita recién nacida, la misma que no escuchó llorar al momento del alumbramiento.
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