Trabajar de forma excesiva o bajo presión puede originar graves males a la salud, e incluso la muerte. Así lo informó la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que confirmó que al año unos 2 millones 780 mil trabajadores mueren a causa de accidentes laborales y enfermedades profesionales.
Para dicho organismo, los males del sistema circulatorio (cáncer, arritmias, aneurisma) originan el 31% de muertes. Le siguen las enfermedades respiratorias (gripes, neumonía, sinusitis) y por último los dolores musculares (lumbalgia, dolor de espalda).
“El 20% de trabajadores en el mundo sufren de pérdidas auditivas que son atribuidas a exposiciones en el trabajo. Además, están las perdidas visuales por el uso de la computadora”, refiere la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Contenido GEC