Luego de un accidente grave, es común que una o más ambulancias lleguen al sitio. Son muchos los que respiran algo más aliviados al ver cómo los paramédicos atienden rápidamente a los heridos porque eleva las posibilidades de que sigan con vida. Sin embargo, ¿qué pasaría si el personal de emergencia hace algo muy distinto cuando las puertas traseras del vehículo se cierran? Pues, en España se dio un hecho muy oscuro.
El portal de La Vanguardia dio cuenta de que un par de paramédicos serán procesados por haber, presuntamente, violado a una paciente al interior de una ambulancia. El hecho tiene lugar en la conocida Barcelona.
Según la información llegada desde España, el hecho se dio en agosto de 2015. En los días de ese mes, una mujer había salido a festejar una noche sin prever que bebería mucho alcohol y terminaría tumbada en la acera.
Ya en la madrugada, y tras una serie de reportes, una ambulancia se aproximó a la zona para atender a la fémina. Ella estaba casi inconsciente cuando los paramédicos la metieron al carro de emergencias y se dispusieron a verificar qué le pasaba.
Es así que, indica la denuncia, uno de los sujetos comenzó a saciar su apetito sexual al verla indefensa. En medio del ajetreo que ello significó, la víctima recobró el sentido y vio cómo el hombre estaba ultrajándola.
Ella no pudo evitar llorar y los dos paramédicos solo optaron llevarla a su casa, no sin antes hacerse firma el alta voluntaria. Días después, la joven informó del hecho ante la Policía.
En tanto, los sanitarios han negado las acusaciones de la mujer, pero el GPS de la ambulancia indicó que el vehículo se acercó al lugar que ella describió y sería la prueba contundente de que ellos violaron a la fiestera. La justicia ha pedido 7 años de prisión para los paramédicos, 6 años más de vigilancia por parte de la Policía y algunas medidas más que contemplan normas de conducta y el pago de una indemnización.
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