Mucho cuidado. La Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid), advirtió que la automedicación con dexametasona para las personas diagnosticadas con COVID-19, podría afectar gravemente su estado de salud, generar complicaciones que hagan necesario su internamiento en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y hasta provocarles la muerte.
“El uso innecesario de dexametasona puede reducir la capacidad de respuesta de las defensas de nuestro organismo, la cual es fundamental para afrontar el ataque de cualquier virus. A ello se suman efectos como el aumento de peso, retención de líquidos, hinchazón, debilitamiento de huesos, atrofia muscular, aumento de la presión arterial e incremento de los niveles de azúcar en diabéticos”, explicaron los especialistas de la Digemid.
Asimismo, el personal de la salud, advirtió que en ningún caso se debe utilizar dexametasona para prevenir o controlar los síntomas iniciales del COVID-19, como dolor de garganta, tos o fiebre, entre otros.
Además, recomendaron a la población evitar la automedicación con cualquier otro medicamento o producto de origen desconocido, peor aún si se promocione a través de internet y no cuentan con registro sanitario que autorice su uso y comercialización.
“En caso de sentir algún malestar o sospechar que se ha contraído la enfermedad, acuda al centro de salud más cercano, donde el médico evaluará su caso y determinará el tratamiento a seguir, el cual debe ser cumplirlo respetando las dosis recetadas. Ante cualquier duda sobre el uso de medicamentos, solicite la orientación de un químico farmacéutico en farmacias o boticas formales”, finalizaron.
Contenido GEC