En las playas de Chorrillos, los veraneantes no dejan de asombrarse al ver nadando como toda una experta a una perrita de nombre Cristina. Al lado de su amo, la simpática mascotita va y viene por el muelle de Pescadores.
Cristina es chorrillana de corazón, tiene 4 años y es de raza mestiza. Siempre está al lado de su gran amigo Orlando Guardado, quien la adoptó luego de verla muy vulnerable y en busca de alguien que la ame y cuide.
“Una amiga me llevó a un lugar para adoptar una mascota, la acompañé y en eso se apareció Cristina, se me acercó como pidiéndome que la lleve y desde ese entonces nos hemos vuelto inseparables”, refiere Guardado.
El momento más duro
La perrita llegó a la vida de Orlando en el momento más duro para él, pues la estaba pasando muy mal durante la pandemia, necesitaba apoyo emocional y fuerzas para salir adelante. Y aunque no lo crean, Cristina fue su soporte, ya que con sus travesuras y revueltas que hacía en la casa, el hombre vio la vida de otra manera.
Como buen chorrillano, Orlando tiene la costumbre de darse sus chapuzones en el mar antes de ir a trabajar.
Y tras adoptar a Cristina, un día decidió llevarla a la playa para que lo acompañe. Se subió al muelle y se lanzó, minutos después hizo lo mismo su perrita y desde ese entonces ambos aman disfrutar de las olas y son todo un espectáculo, pues la gente se les acerca para conocerla y tomarse fotos.
“Mi perrita ama la libertad, nunca dejó que la amarren y me demostró ser muy obediente, se puede ir a pasear y cuando la llamo viene al toque. No podemos estar sin el mar. Ya es una costumbre, es parte de nuestras vidas”, dijo muy sonriente.
Sepa que
- Orlando es soltero y cuando se va a trabajar deja a Cristina con sus sobrinos.
- La perrita come comida de casa y también le dan bolitas.