Su historia comenzó al llegar al Mercado El Retablo con 21 años, donde Irma Mamani recuerda que “alquiló un pequeño puesto con puerta a la calle y al lado del lugar donde botaban la basura”.
“Fue muy duro el comienzo y muy complicado, y por la misma razón que era joven pensé muchas veces en rendirme e iniciar y/o emprender en otro negocio”, relata sobre la bodega ‘Viky’, que lleva ese nombre por como todos la conocen.
No desfalleció gracias a su perseverancia, la necesidad y sus buenos compañeros del centro de abasto que la aconsejaron y ayudaron, recuerda, pero sobre todo por el impulso de trabajar para el bienestar de su único hijo, Leonardo.
Con mucho esfuerzo y sacrificio, Irma Mamani ahorró y pudo cumplir su sueño de comprar un puesto (el E-15) en el Mercado El Retablo, en la avenida Universitaria 7355-7301 (Comas), donde trabaja desde las 8 de la mañana.
Ser bodeguera ha cambiado su vida, reconoce, porque la bodega ‘Viky’ “no es un puesto de abarrotes más”, sino sobre todo un lugar adonde llegan sus clientes hombres y mujeres a recibir la mejor atención, obtener los productos que necesitan y hasta para conversar un ratito. Y ella los recibe con una sonrisa.
Hoy vende de todo, como abarrotes, productos de limpieza en general, dulces y perfumes de todas las líneas de catálogo, y se ha levantado de malos momentos en sus 28 años de trabajo como bodeguera. “Uno aprende a levantarse y rescatar lo positivo”, comenta esta mujer luchadora.
La bodega ‘Viky’ es una de las 10 finalistas del concurso #LaBodegueraConMásPunche, que organizan la Asociación de Bodegueras del Perú (Agremub) y el diario Trome.
El público podrá elegir a su favorita y la ganadora de #LaBodegueraConMásPunche recibirá 10 mil soles en efectivo.
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