La muerte de una inocente trabajadora de limpieza de la Municipalidad de Lima en la balacera en el Jirón de la Unión ha desatado una ola de repudio en las redes sociales contra las autoridades del gobierno, a los que culpan por no tener mano dura con la delincuencia que hoy nos hace vivir entre el miedo y el terror.
En Twitter muchos usuarios lamentaron la pérdida de la vida de la trabajadora de limpieza, quien solo cumplía con su trabajo y que fue asesinada de un balazo en la cabeza cuando se desató esta balacera en el Jirón de la Unión que también dejó cuatro personas heridas.
Otros usuarios piden que tanto el presidente de la República como las autoridades en general poner mano dura para combatir esta ola de delincuencia y atrapar a los cabecillas de bandas de asaltantes que no tienen ningún reparo en matar a inocentes con tal de conseguir su objetivo.
Esta no es la primera vez que en el Centro de Lima se desarrollen este tipo de balaceras como la de Jirón de la Unión. Hace unos meses, en plena Plaza de Armas, un grupo de delincuentes asaltaron una joyería y se llevaron todo lo que pudieron a vista y paciencia de decenas de policías que se encuentran alrededor.
En mayo del 2016, en el Barrio Chino también se desató una balacera en la que ocho delincuentes, a bordo de cuatro motos, asaltaron a un grupo de cambistas delante de decenas de transeúntes que a diario pasan por el lugar.
“Cuatro sujetos con rostros descubiertos llegaron caminando, uno de ellos con un paralizador eléctrico. A dos cambistas les pasaron corriente para quitarles sus chalecos, al igual que a los otros. Solo les dejaron sus canguros”, dijo un testigo del asalto en el Barrio Chino.
Ejecutado el atraco en el Barrio Chino, en solo 16 segundos, y ya con los cuatro chalecos de sus víctimas, los bandidos subieron a cuatro motos lineales, cada una con un conductor que los esperaba cerca, y efectuaron disparos al aire para evitar que alguien intente detenerlos.