Curiosa situación vivida en Latinoamérica. Este es el extraño caso de una joven que buscaba un cibercafé para imprimir unos documentos y terminó entrando al hogar de una familia en México donde el dueño le invitó pozole y refresco. El relato de Fathyma Lex llegó a la red social TikTok y rápidamente le dio la vuelta al mundo volviéndose viral. Aquí te contamos los detalles.
La chica mexicana usó la popular red social para contar el extraño suceso que vivió cuando había caminado por varias calles sin encontrar un local abierto o donde tuvieran una impresora disponible. Ya cansada y abrumada por su ‘mala suerte’ vio una puerta abierta y no dudó en entrar.
Al asomarse descubrió que había dos computadoras entonces saludó al hombre que estaba en la sala, se sentó frente a una y hasta pidió prestado un mouse.
“Seguí caminando y caminando hasta encontrar un ciber. Y eso pasó, encontré uno que la verdad sí se me hizo muy peculiar porque nada más tenía dos computadoras, pero dije ‘éste no es el momento de estar de juzgona’ y me metí”, contó en su video viral.
La invitaron a comer pozole con refresco
La curiosa historia revelada en TikTok dio un vuelco total cuando vio que entraron unos niños que venían de la escuela y comenzaron a sacar unos trastes para poner la mesa. Uno de ellos le ofreció un vaso de refresco el cual aceptó pensando que era cortesía del cibercafé y hasta dijo ‘Ah mira, qué amable. Muchas gracias’; sin embargo, cuando le acercaron un plato de pozole todo quedó revelado: se trataba de un hogar familiar y era la hora de comer.
En su video Fathyma Lex indicó que logró imprimir sus papeles y cuando preguntó cuánto debía se llevó otra sorpresa: “No, es que ¿qué crees? Que aquí no es ciber ¡esta es nuestra casa!”.
“Yo empecé a sentir la cara pero si bien caliente, le dije ‘pero cómo que no es ciber, señor, ¿por qué no me dijo?’ y dice ‘no, muchacha, es que yo te vi muy concentrada y la verdad es que no te quise interrumpir’. A mí se me caía la cara de vergüenza”, contó en su cuenta @fathymalex.
Totalmente impactada por lo sucedido, la joven le dejó 20 pesos al señor por lo bien que se portó con ella.
Fathyma Lex usó TikTok para narrar una experiencia vivida “hace unos dos, tres años” cuando estaba en la universidad y postulaba a una beca. Su historia tuvo un final feliz pues la ganó y también le dieron una impresora, por lo que no tuvo que volver a buscar un cibercafé nunca más.