Una canadiense se mudó a España, pero su estadía no ha sido tan positiva como ella pensó, pues las diferencias culturales parecen acrecentarse cada vez más y hay muchas cosas con las que no puede lidiar. Por ello, confesó en TikTok las cosas que odia viviendo en Madrid, testimonio que se hizo viral, pero a la vez le valió miles de duros comentarios.
Las costumbres que odia de España
April The Great (@aprildgr8) compartió dos clips que tituló de la siguiente manera: “cosas españolas que enviarían a los canadienses a un coma”, mensaje que demuestra lo poco que la tiktoker ha podido adaptarse al modo de vida español.
El primer punto que le desagrada son los ibéricos que llevan zapatos dentro de la casa, pero también en casas ajenas. No contenta con esto, también reveló que no puede lidiar con los horarios de los bancos, pues asegura que una persona que trabaja de 9 a 5 no tiene tiempo para ir a una agencia bancaria (normalmente, estos negocios cierran puertas a las 2 de la tarde).
Mira aquí el video viral
Por otro lado, los horarios del almuerzo y cena le resultan incómodos pues el primero es de 2 a 3, mientras el segundo de 9 a 10. En ese mismo tema, contrario a lo que sucede en Canadá o Estados Unidos, en países como España se tiene la costumbre de compartir la comida, no como en el mundo anglosajón donde son más individualistas, inclusive para los alimentos.
Asimismo, mostró que los españoles son demasiado expresivos, incluso en la calle (PDA, o “public display of affection”, muestra pública de afecto), hecho que pone muy nervioso a los canadienses. Finalmente, confesó que no estar a gusto con la forma directa que tiene los españoles para expresarse, poniendo de ejemplo “dame una cerveza”, afirmando que en su país lo dirían de una manera más “educada”.
“Qué delicados son los canadienses”
El video causó gran revuelo en TikTok y, de inmediato, miles dejaron su opinión para apoyarla o criticarla: “nosotros tampoco sabemos cuándo ir al banco con esos horarios”, “qué delicados los canadienses, bro”, “comer a las cinco de la tarde se llama merienda”, “pues, espérate que se entere del horario de verano”, “creo que nadie en España dice ‘dame una cerveza’ estando en un bar”, “la gente que no se quita los zapatos al entrar en casa me da miedo”, “a las 5 de la tarde estoy merendando, chiquilla ¿cómo voy a cenar a las 5 si luego, a las 8, vuelvo a tener hambre?”, “del buen tiempo, la buena comida y la calidad de vida no dices nada ¿no?”, “es que quitarme las zapatillas en casa de otro es como raro”.