Natalie Hirts decidió que tenía que cambiar su estilo de vida luego de ver un selfie suyo tras el nacimiento de su tercer hijo. Tal fue su motivación y determinación que ahora es un ejemplo para cientos de mujeres que la siguen en Instagram.
La joven madre de 28 años llegó a pesar 130 kilos, aumento que se dio a lo largo de sus tres embarazos. "Me disgustaron mis fotos y no podía creer la diferencia. Estaba en 48 kilos cuando me casé", contó a Daily Mail.
Decidida a cambiar de vida, Natalie empezó a alimentarse saludablemente y a hacer ejercicios. "Me reincorporé a un gimnasio con guardería y fui a clases diarias", contó. Asimismo, dijo que aumentó su consumo de agua a tres litros diarios y que comenzó a controlar sus porciones de comida.
La joven madre llegó a bajar 40 kilos por cuenta propia. Es en ese momento que decidió contratar a un entrenador personal y decidió, con el paso del tiempo, convertirse ella misma en una coach para ayudar a otras personas con problemas alimenticios.
Ahora, Natalie trabaja en el gimnasio donde comenzó su cambio de vida y se prepara para ponerse un bikini por primera vez en siete años para participar en un torneo fitness.