Rob Lanteigne es un hombre de Canadá que pasó tres días construyendo un enorme “oso de nieve” en su patio trasero como regalo por el Día de San Valentín para su esposa y su creación puede ser vista desde la carretera 38 de Kingston, ciudad de Ontario, para que todos puedan disfrutarla.
Lanteigne, quien trabaja para el sistema penitenciario canadiense y es dueño de un negocio local, creó la estructura para sorprender a su esposa Tina, quien está feliz de que su presente haya sido pensado como una forma de darle alegría a su comunidad.
“Él siempre va a lo grande”, dijo Tina Lanteigne a Global News. “Simplemente trae una sonrisa a la cara de todos, lo cual es muy agradable, especialmente en esta época del año cuando tantos están tan deprimidos con todo el COVID-19 y esas cosas”, añadió.
El oso mide más de 4 metros de alto y fue tallado con las herramientas que Rob Lantenigne tiene en su garaje. De todos los detalles que tiene como los discos de hockey que son sus ojos, nariz y pies, el corazón que luce en el medio de su estómago es solo para su esposa.
A ello, el oso también viste una elegante bufanda roja y sostiene una botella de Coca-Cola para asemejar a los osos polares de la recordada campaña navideña de la mencionada compañía de gaseosas. Por las noches, tiene luces para ser visualizado fácilmente.
Tina precisó que la respuesta positiva de su comunidad por su regalo por el Día de San Valentín que compartió en Facebook inspiró a su esposo a hacer futuras construcciones. “El próximo año, estoy segura que hará algo más grande. Siempre le gusta ir más allá de los límites”, bromeó Tina.
Contenido GEC