Desde que Facebook lanzó la opción de transmisión en vivo en su aplicación, varios usuarios la han usado para transmitir momentos que no son precisamente agradables y felices. Este martes se conoció que un tailandés mató a su hija de 11 meses, lo transmitió en vivo por Facebook y luego se suicidó.
El macabro video fue eliminado de la red social, aunque Facebook se tardó unas 24 horas en hacerlo. Las imágenes fueron vistas por miles de veces por personas en todo el mundo.
"Este es un incidente horrible y nuestros corazones están con la familia de la víctima. No hay lugar para actos como estos en Facebook. El vídeo ha sido eliminado", indicó una portavoz de la red social, que tiene más de mil millones de usuarios.
La Policía de Phuket dijo que el sujeto identificado como Wuttisan Wongtalay, de 20 años, filmó dos vídeos. En uno de ellos se le ve ahorcando a su hija desde la azotea de un hotel.
En el segundo video se ve cómo Wongtalay lanza a la menor desde la azotea de un hotel en Phuket para luego recuperar el cadáver después de que muriese ahorcada. Tras el terrible acto, el hombre se quita la vida.
Familiares de las víctimas vieron la retransmisión del crimen y avisaron a la policía local, quienes hallaron los cuerpos sin vida del padre y la niña.
Las autoridades tailandesas creen que el padre sufría paranoia y pensaba que la madre de la niña tenía un amante.
Este suceso eleva las presiones para que Facebook imponga medidas que permitan detectar y borrar lo antes posible contenido violento o de crímenes, después de que hace dos semanas un hombre matara en Cleveland (Ohio) a un anciano y colgara el vídeo en la famosa red social.