Iba a ser sacrificada en un matadero pero ahora vive a lo grande en un paradisiaco lugar donde pasa la mayor parte del tiempo practicando su pasatiempo favorito: la pintura. Esta es la historia de la cerdita ‘Pigcasso’.
‘Pigcasso’, de más de 204 kilos, se ha vuelto la protagonista de uno de los virales más compartidos de las últimas días al conocerse que había sido criada para ser sacrificada a la corta edad de cuatro semanas.
Su salvadora y ahora dueña, Joanne Lefson, cuenta que tras llevar a ‘Pigcasso’ consigo a su casa descubrió sus dotes artísticos cuando buscaba entretenerla enseñándole varias actividades.
Armada con suculentas recompensas para cerdos y usando una técnica de adiestramiento usada en perros, Joanne Lefson enseñó a ‘Pigcasso’ a pintar. Ahora la cerdita puede maniobrar pinceles de brocha gorda, cubrirlos de pintura y desplazarlos sobre un lienzo.
Su orgullosa dueña señala que el estilo artístico de ‘Pigcasso’ “es algo que podría llamarse expresionista” y que toma su inspiración de los paisajes de su actual hogar. Incluso, firma sus trabajos de una forma especial – manchando su hocico de pintura y plasmándolo en su lienzo.
Joanne Lefson ahora piensa vender las pinturas de ‘Pigcasso’ para recaudar dinero para su obra de caridad, Farm Sanctuary SA, que busca concientizar sobre la precaria situación en la que viven los cerdos en las granjas donde son criados para ser sacrificados.
Incluso, señala que planea realizar una exhibición de las obras de ‘Pigcasso’ en los primeros meses de 2017.
“Los cerdos son sorprendetemente inteligentes, son animales excepcionales y queremos inspirar a los consumidores a ser más concientes sobre los productos que compran”, señala Joanne Lefson.
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