William Levy ha mantenido una enorme cantidad de seguidores desde los inicios de su carrera en la década del 2000, quienes habitualmente le hacen muestras de cariño y elogios en sus redes sociales.
Contrario a lo que uno pueda pensar por su exitosa carrera profesional, Levy ha sabido atravesar duros momentos en su vida personal, los cuales son poco conocidos para el público y han marcado su personalidad.
LOS DUROS MOMENTOS QUE WILLIAM LEVY VIVIÓ EN SU INFANCIA
El cubano se refirió en diferentes entrevistas a las duras situaciones que debió vivir en infancia. Nacido en Cojimar, municipio cercano a la Habana, en 1980, Levy no tuvo una infancia fácil, pues sufrió el abandono de su padre.
El actor contó que tuvo que sobrevivir con su madre y sus hermanos Jonathan y Bárbara, pues “siempre tenía hambre”, como contó alguna vez. La familia pasaba grandes apuros económicos y no podía costear productos básicos como la pasta de dientes, zapatos o una pelota para jugar. “Estábamos destinados a vivir la misma vida pobre y miserable sin futuro”, señaló en El Hormiguero.
Levy se salvó de la pobreza cuando, a los quince años, logró mudarse a Miami gracias a su padrastro. Ahí pudo estudiar y hacerse un espacio en el mundo del modelaje y la televisión. En ese ambiente fue que conoció a su exmujer, Elizabeth Gutiérrez, con quien mantuvo una relación desde 2003.
LAS DESAVENENCIAS FAMILIARES QUE WILLIAM LEVY TUVO QUE VIVIR CON ELIZABETH GUTIÉRREZ
Levy y Gutiérrez tuvieron situaciones difíciles como pareja y oficializaron su separación en 2022. Sin embargo, han hecho esfuerzos para mantener la unión familiar en beneficio de sus hijos Cristopher Alexander y Kailey Alexandra.
La ruptura llegó después de varios años de idas y vueltas, con varias especulaciones de crisis en infidelidades.
Sin embargo, una de las mayores preocupaciones para Levy ocurrió en el otoño de 2020, cuando Christopher sufrió un accidente cuando manejaba un coche eléctrico en un campo de golf.
El joven estuvo meses sin poder caminar, tiempo en el que William no pudo estar cerca de él debido a sus compromisos actorales. “Durante la grabación hablaba con él, pero luego tienes que concentrarte con la escena, tienes que reírte… Es un trabajo muy difícil”.
Felizmente para William, su hijo Christopher se recuperó y pudo volver a jugar al béisbol, su deporte favorito.