Las laptops son dispositivos tecnológicos versátiles que acompañan al usuario en una amplia gama de actividades, desde el estudio y el trabajo hasta el entretenimiento. Por ello, debido a su uso constante en diversas áreas de la vida, es crucial estar atentos a su desempeño a través del tiempo para identificar el momento adecuado para reemplazar el equipo por uno nuevo.
Los expertos mencionan que la vida útil de una laptop es de 3 a 5 años, aunque esto dependerá de diversos factores como el uso que se le designe, el cuidado y mantenimiento que reciba y los avances tecnológicos que puedan influir en su desactualización.
Por otro lado, según Canalys, el mercado de PC ha ganado impulso y se prevé que esta tendencia continúe impulsada por la transición a Windows 11 y la creciente adopción de PC con IA. En el reciente trimestre, los envíos globales de computadoras de escritorio y portátiles alcanzaron 62.8 millones de unidades. La combinación de una mayor demanda y recientes innovaciones tecnológicas crea un panorama dinámico, donde es crucial evaluar la adquisición de un nuevo equipo.
“Además de tener una experiencia satisfactoria en cuanto a productividad, seguridad y actividades diarias, es recomendable evaluar regularmente el rendimiento del equipo, así como estar informado sobre las recientes tendencias tecnológicas. Es importante recordar que una laptop actualizada proporciona un mejor rendimiento, así como un ecosistema más seguro y también la tranquilidad de contar con un equipo compatible con las últimas innovaciones tecnológicas que acompaña a los usuarios a realizar hasta las tareas más difíciles”, menciona Jaime Pomareda, gerente del segmento consumo de Lenovo Perú.
Por ello, para saber identificar el momento en que se debe renovar una laptop, los especialistas de Lenovo presentan las siguientes recomendaciones:
Al principio del ciclo de vida de una laptop, es común experimentar fluidez al abrir aplicaciones, navegar entre pestañas y al utilizar diferentes programas. Con el tiempo, es posible notar que las aplicaciones tardan más en ejecutarse y se retrasan tareas simples. Esto sucede cuando el procesador, la memoria RAM y el almacenamiento alcanzan su límite y ya no pueden seguir el ritmo del usuario.
Por ejemplo, editar un video en una laptop con un procesador antiguo, 4GB de RAM y un disco duro tradicional puede ser una experiencia frustrante: completar el procesamiento del video final podría tomar horas. Asimismo, es importante prestar atención a la duración de la batería, temperatura del sistema y a los ruidos inusuales, ya que podrían señalar problemas de hardware que afectan el rendimiento, indicando que es momento de renovar el equipo.
La tecnología a nivel de software y hardware se encuentran constantemente en evolución, por ello, si se nota que la laptop no puede ejecutar las últimas versiones de software o los últimos juegos, es posible que se estén exponiendo a importantes pérdidas de características y funcionalidades. Además, el desfase tecnológico afecta la compatibilidad con dispositivos y periféricos más nuevos, lo que restringe la funcionalidad del equipo y la plena utilización de las innovaciones.
Con el tiempo, los sistemas operativos y las aplicaciones más antiguas dejan de recibir actualizaciones de seguridad exponiendo la laptop a riesgos de seguridad cibernética y puede crear incompatibilidades con software y servicios más recientes. Por ejemplo, para acceder a la última versión del sistema operativo Windows 11, incluyendo los beneficios de seguridad que brinda, es preciso que el dispositivo cumpla con requisitos mínimos del sistema que las laptops antiguas podrían no cumplir. Por ello, si se está utilizando un sistema operativo que ya no recibe actualizaciones, es importante evaluar la renovación de la laptop para garantizar la seguridad de los datos.
En determinados casos, la actualización de componentes individuales puede ser una solución temporal pero costosa. Dependiendo del componente que se desee actualizar, el costo puede aumentar considerablemente. Por tanto, es recomendable evaluar cuidadosamente el valor a largo plazo y la relación costo-beneficio al tomar esta decisión. La llegada de ofertas especiales en temporadas comerciales de alta demanda como los Cyber Wow o Cyber Days puede resultar estratégico para adquirir una nueva laptop a un precio más accesible.
A medida que pasan los años, los intereses y los entornos académicos y laborales de las personas evolucionan, lo que influye en las funciones que necesitan de sus dispositivos. Si la laptop actual no puede satisfacer las demandas más recientes del estilo de vida del usuario, como ejecutar software exigente en términos de recursos o no soportar los programas necesarios para sus nuevas responsabilidades, es recomendable considerar la adquisición de un nuevo equipo para mantener la competitividad y eficiencia en las labores diarias.
Por ejemplo, un estudiante de arquitectura que antes solo necesitaba su laptop para tomar apuntes y redactar trabajos, podría requerir ahora un equipo con mayor capacidad de procesamiento gráfico y memoria RAM para ejecutar programas de diseño y modelado 3D, esenciales en su nueva etapa académica.
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