Cómo lavar y cuidar las ropas de baño y bikinis para que no se estropeen

Con la llegada del verano, llegan también los fines de semana en la piscina o la playa, los baños de sol y solemos permanecer todo el día en ropa de baño o bikini. Vestimos muy cómodos y frescos porque, al fin y al cabo, es lo que uno busca en esta temporada tan calurosa del año.

Sin embargo, y pese a que podamos tener varias ropas de baño o bikinis, estos se deterioren mucho, por lo que es necesario cuidarlos si queremos tenerlos mucho tiempo.

Por eso hoy en Trome te ofrecemos unos trucos caseros para lavar las ropas de baño y bikinis y que no se estropeen rápido.

Cómo lavar ropas de baño y bikini sin estropearlos

Las ropas de baño y bikinis son prendas que se deben lavar cada vez que se usan, ya que el cloro, el sol y la sal de la playa debilitan sus tejidos. Por ello, es necesario tener en cuenta ciertos aspectos:

1. Quitar la arena antes de lavarlos. Lo primero que debemos hacer para lavar nuestras ropas de baño o bikinis y que duren el máximo tiempo posible es eliminar la arena que se queda pegados en ellos. Para eso, solo será necesario poner la prenda en remojo con agua fría durante unos minutos y darle un par de vueltas para que los granos de tierra se desprendan.
2. Lavar siempre después de usar y antes de que se seque. Los bañadores y los bikinis se deben lavar después de cada uso y no como sucede con otras prendas, cada dos días o similar. Sin embargo, el lavado debe ser muy suave y, lo mejor es hacerlo de forma manual. Para ello, bastará con poner un poco de agua templada en un balde con un poco de jabón neutro.
3. Lava con cuidado. Luego, lo movemos un poco y lo frotamos suavemente para quitarle la sal o el cloro que han quedado en el tejido. Es aconsejable no frotarlo demasiado, pues de lo contrario, las fibras se estropearán y el bañador se verá viejo muy rápido. Si queremos usar la lavadora, lo ideal es hacerlo usando también un jabón neutro y con un ciclo de ropa delicada.
4. No escurras tu ropa de baño. Muchos son los que escurren las ropas de baño o bikinis para sacar el exceso de agua. Esto es algo que se debe evitar tanto como sea posible, pues lo único que conseguimos con ello es que estos cojan malas formas y luego no queden bonitos.
5. Nunca se debe secar un bañador al sol. Por mucho que estén hechos para soportarlo, el sol acaba por tener un impacto negativo en los tejidos de la ropa de baño o bikini. Si lo pensamos bien, estas prendas se pasan casi todo el día al sol, por lo que cuando las tendamos, será mejor darles un poco de descanso. Para ello, podemos tenderlos a la sombra y durante la noche.

Para que nuestros bañadores duren más, también es una buena idea irlos alternando. De este modo, no los sometemos al sol a diario, por lo que no necesitaran de tantos lavados. Tener un par o tres de ellos, nos permitirá lucir uno diferente cada día a la vez que nos durarán mucho más tiempo.