Aquellas ollas comunes que funcionan en la casa de una vecina, en un local comunal del barrio o en cualquier rinconcito al aire libre simbolizan un gran sostén y alivio para miles de familias en situación vulnerable. Para ellos, las ollas son una esperanza frente a las dificultades para cubrir una canasta básica de alimentos que, según Apoyo Consultoría, impacta a más de 1 millón de peruanos.
Detrás de estas ollas, hay personas extraordinarias, en su mayoría mujeres que —sin esperar ninguna retribución— se organizan y sobrepasan dificultades para alimentar a sus familias y vecinos. Para ayudarlas y hacer de las ollas comunes organizaciones sostenibles, nació Ollas que Desarrollan. Este programa, impulsado por Alicorp, trabaja en equipo con aliados estratégicos para dar soporte a las lideresas de las ollas comunes y apoyarlas en su camino al desarrollo.
“Desde que inició el programa, buscamos sumar aliados que permitan contribuir con más ollas comunes y beneficiar a más familias. Desde Alicorp, comenzamos con la entrega de alimentos, pero esa es solo una parte de la atención que estas organizaciones requieren. Por eso, buscamos empresas que tuvieran un sólido compromiso con generar un impacto social”, expresa Malena Morales, vicepresidenta de Asuntos Corporativos de Alicorp. Gracias a sus esfuerzos, a la fecha han sumado a más de 12 aliados, entre empresas, instituciones educativas y financieras.
Unidos por un mañana mejor
En Ollas que Desarrollan el trabajo en equipo es la base de todo: la experiencia, la visión y el conocimiento de los aliados ha sido crucial para que las lideresas reciban la ayuda necesaria. Desde un primer momento, se decidió que fuera la ONG Juguete Pendiente la encargada de articular el programa, pues conocía de cerca la realidad de las ollas y venía trabajando con varias de ellas desde la pandemia. Además, cumple un rol muy valioso: mantiene un estrecho lazo de confianza con las mujeres de las ollas y la comunidad.
Desde el ámbito educativo, la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC) también se sumó a la ‘chamba’ de alimentar un mañana mejor. Morales cuenta que el aporte de la UPC ha sido clave para capacitar a las lideresas y empezar la fase de emprendimiento, una etapa que prepara a las lideresas para crear distintos negocios y así generar ingresos complementarios que aseguren la sostenibilidad de las ollas comunes.
“Cuando decidimos fortalecer el programa con esta fase, buscamos un aliado con altos estándares académicos y que desarrollara programas de negocios. Así, trabajamos junto al equipo directivo y docente de la UPC, quienes pusieron a disposición su infraestructura e instalaciones para las capacitaciones”, manifiesta Morales.
Mibanco, Record, Primax Gas, Cargill y Auna también son parte de la iniciativa. Con la esperanza y entusiasmo de mejorar cada vez más el programa, Ollas que Desarrollan continúa actuando para juntar aliados. Aún hay mucha ‘chamba’ por hacer y toda contribución es siempre bienvenida para fortalecer el programa en beneficio de miles de personas.
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