Netflix anunció este viernes que destinará 100 millones de dólares a ayudar a los trabajadores de la industria audiovisual afectados por la crisis global desencadenada por el coronavirus.
“La crisis del COVID-19 es devastadora para muchas industrias, incluida la creativa. Casi todas las producciones de cine y televisión han parado en todo el mundo dejando a cientos de miles de miembros de equipo y reparto sin trabajo. Eso incluye a carpinteros, electricistas y conductores, muchos de los cuales cobran por hora y proyecto”, dijo en una nota el jefe de contenidos de Netflix, Ted Sarandos.
“Esta comunidad ha apoyado a Netflix durante los buenos momentos y queremos ayudarles ahora en los malos momentos, especialmente mientras los gobiernos están todavía resolviendo qué tipo de apoyo económico proporcionarán”, añadió.
Sarandos explicó que 85 de los 100 millones de este fondo de asistencia irán destinados a los empleados de sus propias producciones que se han quedado sin trabajo por el parón en los rodajes.
“Esto se añade a las dos semanas de sueldo que ya nos comprometimos a pagar al reparto y al equipo de las producciones que nos vimos obligados a suspender la pasada semana”, puntualizó.
Los otros 15 millones del fondo se usarán para ayudar a trabajadores de la industria audiovisual no directamente relacionados con Netflix.
“Lo que está pasando no tiene precedentes. Solo somos fuertes si lo son la gente con la que trabajamos, y en Netflix somos afortunados de poder ayudar a los más golpeados en nuestra industria durante este difícil momento”, cerró Sarandos.
Como el resto de actividades económicas, la industria del entretenimiento audiovisual está en “shock” ante las graves consecuencias que pueda tener la pandemia del coronavirus, que está paralizando casi por completo la vida en países como España o Italia.
Las compañías cinematográficas han sido de las más golpeadas debido al cierre de las salas en numerosas partes del planeta, que ha llevado al retraso o suspensión sin nueva fecha de los estrenos de películas como “No Time to Die” (James Bond), “F9” (“Fast & Furious”), “Mulan” o “Black Widow”.
Y en general, los rodajes tanto de cine como televisión han tenido que cancelarse hasta nueva orden.
El sindicato del gremio del entretenimiento en Estados Unidos, conocido como IATSE (siglas en inglés de Alianza Internacional de Empleados de la Escena), estimó el jueves que se han perdido al menos 120.000 empleos en esa industria por el coronavirus, en su mayoría vinculados a Hollywood.
La sangría se acentúa al constatar que esta organización ronda los 150.000 afiliados, por lo que 80 % de sus miembros, que en su mayoría son técnicos que encadenan trabajos como autónomos, habrían perdido sus puestos después al haberse paralizado por completo los rodajes.