Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por una sabrosa papa a la huancaína con arroz con pollo, presa grande, y una jarrita de chicha morada. “María, los peruanos trabajamos duro, nos esforzamos por salir adelante, pero en muchos hogares se está haciendo cada vez más notoria la falta de papá y mamá para el cuidado y atención de los hijos y también cada vez es menor el disfrute como familia, pareja o esposos. Por el trabajo y hasta el tráfico que hace más difícil movilizarnos, los niños pasan largas horas solos en casa o al cuidado de familiares o niñeras. Los adolescentes empiezan a ‘enviciarse’ con juegos y el Internet y los más pequeños son presa más fácil de terribles accidentes.
Además, las peleas y discusiones ocurren en cualquier hogar, pero no debemos dejar que se vuelvan parte de la rutina. Hay familias que incluso llegan a disputas, líos judiciales y hasta agresiones por temas de dinero y herencias. Ni respetan a los abuelitos.
Todos queremos hijos que crezcan sanos y felices y un hogar donde reine el respeto y la armonía. Para ello, los psicólogos indican que hay acciones para poner en práctica:
No pierda la oportunidad de iniciar una conversación con su familia ni decirles ‘te quiero’.
Fíjese qué hace felices a su esposa° y niños para engreírlos cada vez que pueda o darles ‘un gustito’. Quizá él esté esperando encontrar ‘de sorpresa’ que le prepararon su plato favorito. Ella esté extrañando una caricia antes de que salgan al trabajo, una llamada o un bonito mensaje que le alegre el día. Tal vez sus hijos estén deseando ver una película en el cine.
Confíe en sus niños y estimule sus habilidades. Deles oportunidad de hacer cosas por ellos mismos, que se sientan valorados dentro y fuera del hogar.
Forme disciplina, orden y enseñe el respeto con el ejemplo.
Controle las peleas entre hermanos. Es natural que haya discrepancias y discutan o peleen, pero deben enseñarles desde chiquitos a llegar a acuerdos.
Evite las tentaciones y no caiga en adicciones. No solo la infidelidad toca la puerta. También los excesos con el licor y juegos de azar.
Modifique rutinas y tengan momentos exclusivos para compartir entre dos. Póngale ganas. El estrés y el cansancio diarios no son aliados para una relación.
Procuren hacer cosas en familia (juegos de mesa en casa, salidas a caminar, al cine, a comer u otros).
Tómense fotos familiares. Verá que conforme pase el tiempo será más valorado y podrán disfrutarlo más”.
Gary tiene razón, hay muchas cosas que podemos hacer para mejorar nuestra vida y hogar. Me voy, cuídense.
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