Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un saltadito de pollo con arrocito graneado y rocotito molido. Para tomar pidió una jarrita de naranjada. “María, me quedé sorprendido por la historia de Seti López, un cocinero emprendedor, dueño del restaurante Esperanza, que abrió en San Juan de Miraflores honor a su madre, quien vendía comida en su barrio.
Seti trabajó con chefs de la talla de Gastón Acurio, Virgilio Martínez y el francés Hervé. Y muchas veces lo hizo gratis con el afán de aprender de todas las áreas y algún día poner su propio negocio y triunfar. De todos ellos sacó lo mejor, como por ejemplo la disciplina y preparación, el amor por la cocina peruana y tener una mirada global para llevar la gastronomía nacional a otras latitudes del planeta.
Pero lo mejor es el homenaje a su mamá, símbolo del trabajo y la abnegación. Ella lo involucró en la cocina y así fue adquirendo el gusto por la preparación. Seti es un ejemplo de constancia, sacrificio y resiliencia para los cientos de miles de jóvenes en el país que buscan conseguir un trabajo o la consecución de un sueño.
Este joven, nacido en un barrio popular y de una madre humilde, no se dedicó a la delincuencia, las drogas o la vagancia. Estudió, trabajó sin descanso y, luego de aprender, puso su negocio con el que le va bien. Y todo esto sin dañar a nadie. Su emprendimiento es el ejemplo de que sí se puede triunfar con honestidad y sacrificio.
Qué diferente a esos delincuentes que asaltan mediante raqueteo a inocentes personas, o los vendedores de droga, cuyo producto enbrutece a la juventud. Ni qué decir de los malos políticos, que se hacen elegir no para servir al pueblo sino para robar o beneficiarse.
Por eso decenas de ellos, como los expresidentes Alejandro Toledo o Pedro Castillo, están presos pese a haber dirigido un país entero. Por eso, joven peruano, tú que estás dudando qué hacer con tu vida, sigue estos consejos muy valiosos:
- Trabaja en lo que te importa, en lo que te gusta. Y hazlo con pasión, pero también con paciencia. Porque las cosas no se hacen de la noche a la mañana.
- Rodéate de buenas personas, no solo honestas y ‘pilas’, sino también de gente que aporte o sea más preparada que tú. Aleja a los vagos o los pesimistas.
- Construye un buen equipo. Los mejores líderes dedican tiempo y esfuerzo en lograr un equipo ganador.
- Aprende de tus errores. No temas equivocarte. La vida es así. Con los errores adquieres experiencias. Lógicamente, evita equivocarte mucho.
- La vida no es fácil. No lo es para ti y tampoco para los que están arriba de ti. Si crees que no tienes nada, estás equivocado. Al menos tienes una familia, una casa o un plato de sopa en el almuerzo. Otros no tienen nada de eso.
- El éxito es de los que perseveran. No lo olvides”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.