Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un escabeche de bonito con su porción de arroz y un chilcano de cortesía. Para tomar pidió una jarrita de jugo de maracuyá.
“María, se consumó el fraude en las elecciones de Venezuela y el dictadorzuelo de Nicolás Maduro estará por otros cinco años más al frente de ese sufrido país. Así son los regímenes socialistas, cuando agarran el poder no lo sueltan nunca.
Hace unos años fue Evo Morales, que se reeligió a lo Fujimori varias veces hasta que el pueblo lo botó. Hoy, Bolivia aún sufre las consecuencias de ese gobierno inepto y corrupto, sin gas, con la moneda altiplánica devaluada y mucha hambre.
Y ni qué decir de Cuba, donde la dinastía de los Castro gobierna ¡desde 1959! Imagino el sufrimiento y desesperación de los venezolanos, pero también la impotencia de que les hayan robado el voto el domingo.
Desde que empezó el chavismo hace 25 años, más de ocho millones de venezolanos han huido del hambre hacia otros países, en la mayor diáspora de la historia, y han recalado precariamente en sus vecinos de América Latina, Estados Unidos o Europa.
Quedarse en Venezuela les hubiera significado pasar miseria, carencias, falta de oportunidades y maltratos. Por eso no se entiende cómo alguien puede creer que la mayoría de ese pueblo reeligió a Maduro, un inepto y corrupto por donde se le mire.
Ese dictador y la casta política que lo mantiene quieren mantener el poder para no terminar con sus huesos en la cárcel y seguir despilfarrando los recursos del país, otroramente uno de los más ricos del continente gracias a sus inmensas reservas de petróleo.
El domingo, en Lima, vi a venezolanos llorando tras el anuncio de que ‘Maburro’ ganó los comicios con casi un millón de votos de diferencia. Eso significa que no podrán regresar a su tierra porque seguirán encontrando hambre, miseria, falta de trabajo, sueldos bajos y corrupción.
Hay que mirarnos en ese espejo y no creer en las Sigrid Bazán o Verónika Mendoza, que sueñan con un régimen así. Y, pese a las pruebas, aún apoyan a Maduro”. Me voy, cuídense.
MÁS INFORMACIÓN:
Contenido GEC