Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por una sopita de verduras con pollito, estofado de pavita con sarsa criolla y, para tomar, chicha morada. “María, cada vez hay más gente que , haciéndose préstamos desmesurados que luego no podrá pagar.

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Es que el dinero plástico es como el demonio. La gente compra cosas y dice ‘de aquí lo pago’. Otros más, los que son bien irresponsables, acuden a los prestamistas colombianos del famoso ‘gota a gota’ que cobran intereses exorbitantes. Aquí pasan dos cosas: las cosas están más caras, han subido de precio y la gente ya no llega a fin de mes con su sueldo, y por eso acude a las tarjetas de crédito para pagar sus gastos comunes, como la universidad, el colegio particular o los servicios de la casa. Los demás están embarcados en un nuevo estilo de vida.

Viajan, se compran ropa de moda, comen fuera de casa o adquieren tecnología para aparentar ante los demás y ellos mismos ‘que son felices’. Muy equivocados están. Si siguen por esa senda, podrían perder casa, propiedades o endeudarse por años.

Hay que ser mesurados con nuestros gastos. Más aún en estas épocas de crisis e inestabilidad política, que los peruanos no sabemos cuándo acabará. Hay que pensar en el futuro de nuestros hijos. Y cortar por lo sano de una vez. Amortizar todo lo que se pueda la deuda, para que no siga generando intereses.

Ojo que la época de bonanza del país quedo atrás. Ya no crecemos como antes, mayormente por culpa de este inepto gobierno. Miren nomás cómo no previeron que iba a faltar el combustible para aviones ¡en plenas fiestas patrias! El colmo. Entonces, mientras regresan las épocas de ‘vacas gordas’, hay que ser mesurados. Aquí te damos algunos consejitos para ayudarte a manejar tus deudas:

  • Evita los pagos mínimos. Eso te generará a la larga más dinero por los intereses.
  • Paga antes de la fecha de pago para que evitar intereses por moras o multas.
  • Compra solo cosas mayores con tarjetas de crédito. Para compras menores, como ropa, comida o artefactos chicos, paga al contado.
  • Indispensable es que conozcas tu capacidad de endeudamiento. Es decir, hasta cuánto puedes endeudarte sin correr riesgo.
  • No te llenes de tarjetas de crédito. Usa una o dos máximo.
  • Cuando salgas, siempre lleva dinero en efectivo para no caer en la tentación de usar la tarjeta de crédito.
  • Otra cosa, no uses una tarjeta de crédito para pagar las deudas de otra tarjeta. Pucha, mi amigo Gary tiene razón. No es momento de endeudarse con tarjetas de crédito o préstamos, si no es una emergencia. Ojalá tomen en cuenta estos consejos. Me voy, cuídense.

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