Relájate y vive mejor

Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante para llevarse una papita rellena y un estofado de res con papa amarilla y ajicito molido. “María, ayer conversaba con un doctora, quien me decía que muchos peruanos estamos viviendo estados de angustia y ansiedad por esta pandemia que no tiene cuándo acabar; al contrario, los casos siguen aumentando.

Me explicaba que la salud mental está deteriorada y se están viendo casos de ansiedad, depresión y estrés traumático, lo cual es peligroso porque un organismo debilitado es más proclive a enfermarse. A ese cuadro se suma la falta de trabajo, debido a que cerca de tres millones de compatriotas han perdido sus puestos laborales.

La situación es muy crítica, pero ahora es cuando debemos fortalecer nuestra mente, ayudar a los que más sufren. La palabra clave es equilibrio: ver esta crisis como pasajera y tener fe en Dios que pronto pasará. Al margen, obviamente, de cuidarnos mucho para evitar el virus y llevar una vida sana.

¿Sabían que los médicos han revelado que el estrés, por ejemplo, puede provocar un infarto al corazón? Otro grave problema de nuestra sociedad son las enfermedades mentales que no se tratan. Bueno, a continuación algunos sencillos consejos de expertos para despejar la mente y sentirnos mejor:

• Haz ejercicios físicos. Así liberas emociones, sobre todo cuando vas a explotar. Aumentan la producción de endorfinas, que dan mayor sensación de bienestar. Cuando estés molesto, sal a caminar o correr.
• Respiración profunda. Estos ejercicios ayudan a relajarse, al enfocar la mente en sensaciones corporales en lugar de ideas negativas. Recuéstate, pon las manos en el estómago y cierra los ojos. Inhala y llena de aire tu área abdominal y luego tu pecho. Espera unos segundos y bota el aire de forma lenta. Repite esta fórmula hasta que estés más tranquilo.
• Relajación progresiva. Recostado, cierra los ojos y tensiona los dedos de pies y manos unos segundos, luego afloja. Después tensiona las pantorrillas y la parte inferior de las piernas, luego afloja. Continúa así hasta llegar a la cabeza. Tu mente debe concentrarse en las sensaciones físicas.
• Intenta ser más tolerante con los demás, comprende sus actitudes.
• Sé respetuoso en las calles, principalmente con mujeres y ancianos.
• Evita tener resentimientos o heridas del pasado, pues solo aumentan tu enfado.
• Abandona los pensamientos negativos y piensa de forma objetiva y positiva”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.