Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un lomo al jugo con papas nativas, arrocito bien graneado, rocotito y, para la sed, una manzanilla tibiecita.
“María, leí en ‘Emprende Trome’ la historia de Yanbal y me hizo reflexionar. Esta compañía peruana fue fundada hace más de cinco décadas por Fernando Belmont, quien en 1967 regresó al Perú de Estados Unidos, donde trabajó en firmas de cosmética, decidido a fundar su empresa de belleza. Tenía 19 años y comenzó a vender sus productos puerta por puerta.
En entrevista con Trome, su joven nieta Daniela Aguirre Belmont, quien es parte de Yanbal, señala que don Fernando le decía que todo comenzó con la idea de dar a la mujer una oportunidad de que se quite el delantal y pueda salir adelante, de llevar un sustento a su familia, de ser independiente económicamente, y por eso les propuso ser sus impulsadoras y vendedoras. Hoy Yanbal está en diez países y ha pasado de generación en generación. Esta historia es aleccionadora y debe ser vista con mucha atención, sobre todo por los miles de peruanos emprendedores que inician o tienen sus propios negocios, chicos y grandes. Te dejo algunas frases e ideas que Daniela compartió con el público de Trome:
- ’La transición digital es uno de nuestros mayores retos, también algo de lo que estamos muy orgullosos porque todo el equipo lo está llevando con la mejor disposición’. En estas épocas en las que se debe mantener la distancia social, es fundamental adaptarse a los cambios y hacer uso de la tecnología. Quien no evoluciona, desaparece.
- ’Yanbal es una forma de que muchas personas salgan adelante, una linda manera con la belleza y el empoderamiento de la mujer’. Un emprendimiento es importante porque da la posibilidad de tener independencia económica, de mejorar la vida de esa persona, de su familia y de otros.
- ’Los pequeños negocios deben tener claro su posicionamiento de marca y qué quieren lograr, definir la estrategia para atraer al cliente y estar atentos para atenderlos’. Establecer objetivos, el público al que quieren llegar y siempre darle la mejor atención.
- ’El mayor valor que buscamos transmitir a nuestros colaboradores es el espíritu de emprendimiento, el luchar por sus sueños’. Hay que ser siempre optimistas y valientes. Jamás rendirse ante los obstáculos. El fracaso es parte del éxito, porque se deben extraer enseñanzas de él.
- ’Aprendan de finanzas y habilidades blandas, hoy lo puedes hacer por Internet porque eso les ayudará a llegar mejor al cliente y no tener pérdidas en su negocio’. Muchos emprendimientos con buen futuro fracasaron porque los líderes no tuvieron un adecuado manejo del dinero y gastaron sin disciplina. Se puede comenzar con un curso básico de finanzas, para así invertir de forma inteligente”. Qué buenos consejos. Me voy, cuídense.
María