Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por su pollito a la olla con presa grande, arroz blanco graneadito y una ensalada de vainitas con choclo. Para tomar pidió una jarra con agüita de emoliente tibiecita. “María, el otro día escuchaba una de las conferencias del evento ‘Perú Sostenible’, y me puse a reflexionar sobre las buenas cosas que debemos dejar como legado a nuestros hijos y nietos. Los buenos valores, la educación y la dedicación al estudio y el trabajo son claves, pero también un ¡mundo mejor!, un planeta más limpio. Recuerda que la contaminación y el cambio climático son una gran amenaza para el mundo. El planeta se está calentando desde el Polo Norte hasta el Polo Sur, el calor está derritiendo glaciares y causando la muerte de osos polares, venados, pingüinos y muchos otros animales. En otros lugares del mundo han aumentado las lluvias y caída de nieve, causando huaicos, desbordes de ríos e inundaciones. Son avisos de la natural eza.
- Todos somos responsables. Por ejemplo, con cosas muy simples como reducir las bolsas de plástico que tanto daño le hacen a nuestros mares y ríos, pues tardan en desaparecer hasta 100 años y matan peces, tortugas y diferentes aves. Hay que pensar qué lugar les vamos a dejar a nuestros hijos y nietos. Estos consejos deben ser tomados en cuenta:
- Jamás arrojar basura al mar o ríos. Usar los tachos públicos, pero si no los hay o están llenos, poner los desechos en una bolsa y llevarlos a casa. Es un peligro enterrar la basura en la arena, sobre todo cuando se trata de vidrios o latas (de conservas, gaseosas y otros), porque pueden cortar el pie de algún bañista. Además, la lata se oxida y es mucho más peligrosa.
- Evitar arrojar a la arena o al mar mascarillas y pañales, botellas, bolsas, colillas de cigarros y otros, pues muchas veces son ingeridos por peces y otros animales que mueren.
- Por ejemplo, debemos seleccionar la basura (separar los plásticos, pilas, baterías), recurrir al reciclaje, afinar y dar mantenimiento a los carros, evitar el consumo de tabaco, reducir el gasto de electricidad y otros”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.
TE PUEDE INTERESAR
El estudio y trabajo trae progreso
La dura vida en el penal de Lurigancho
