Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un puré de papa amarilla con pollo al horno y su respectivo plato de arrocito graneado. Para tomar, pidió jugo de maracuyá heladito. “María, el ambiente farandulero fue remecido este martes con la detención nuevamente del cantante de cumbia por acercarse a la casa de la mamá de sus hijos, la cubana Dalia Durán, en Comas.

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El artista estaba impedido por una resolución judicial de acercarse a menos de cien metros del domicilio de la mujer. Kelvin afirma que se presentó porque su misma exmujer se lo pidió y que esta le manda fotos y mensajes donde le pide regresar. Esto fue desmentido por Dalia, quien señala que el cantante la llama para insultarla y aterrorizarla por teléfono.

Esta es claramente una relación sumamente tóxica, donde los más perjudicados son los hijos de ambos. En un ambiente así los niños no pueden crecer y desarrollarse normalmente, más cuando el fiscal ha pedido que el cumbiambero sea internado, otra vez, durante nueve meses en prisión.

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Los dos no han superado el trauma de la separación. Hay ahí algo enfermizo, más aún porque esa relación fue anormal, llena de golpes, recriminaciones y denuncias. Al que le puede ir mal es a John Kelvin. Es que la propiaha dicho que no estuvo de acuerdo con su libertad y deseaba que siguiera internado.

Con todos los antecedentes, un juez lo puede mandar a muchos años entre rejas. Los especialistas siempre aconsejan terminar bien nuestras relaciones, especialmente si hay hijos de por medio. Por eso debes recordar siempre esto:

  • Intenta alejarte de la persona que insiste en mantener la relación tóxica. No pierdas oportunidades y aléjate un tiempo de esta persona. Esto te puede ayudar a perder la rutina y el hábito de verla y dar espacio a percibir las cosas diferente.
  • Hazte estas preguntas. ¿Realmente merezco estar en esta relación tóxica? ¿Quiero vivir de verdad así? ¿Me puedo imaginar todos los días de mi vida adentro de esta relación?
  • Tú no eres el único culpable de que la relación no funcione. El problema siempre es de dos.
  • Acaba con el autoengaño. Primero reconoce que tienes una relación tóxica. Es fácil: Si hay golpes, celos desmedidos, infidelidades, escándalos y separaciones continuas, es que lo estás.
  • Aprende a perder el miedo a tu pareja violenta. Y que te mereces una vida mejor. La razón principal por la cual permanecemos en relaciones tóxicas es por el miedo a no poder encontrar a alguien mejor.
  • Busca ayuda. Puede ser ayuda profesional o el consejo de amigos o familiares. Aférrate a ellos para tener las fuerzas suficientes”. Asu, buenos consejos de Gary. Me voy, cuídense.

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