La Seño María

Ni estudian, ni trabajan

No pierdan el tiempo, dejen a los amigos vagos y pónganse a hacer algo.

Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un seco de cabrito con frejoles, sarsa criolla y ajicito molido. Para calmar la sed pidió una jarra con chicha morada. “María, ya estamos en la recta final del año y me duele que hayan tantos miles de jóvenes que ni trabajan ni estudian, y no saben qué hacer con sus vidas. Algunos ponen como pretexto que sus papás no los ayudan para iniciar una carrera, pero ese argumento no es válido.

Millones de muchachos en el Perú y todo el mundo se han labrado solitos una profesión, trabajando y estudiando a la vez. Ninguno se quedó de brazos cruzados esperando que la plata le llegue del cielo. Mientras poseas una casa donde llegar y comida, ya tienes el 50 por ciento de la labor hecha.

Cuando estaba en la universidad, la mitad de mis compañeros trabajaba. Algunos eran cajeros de pollería, vigilantes, ayudantes de carpintería, albañiles o pintores de brocha gorda.

Al término de su jornada se iban a clases, así cansados y con pocas horas de sueño. Pero lograron terminar sus carreras y ahora ejercen como grandes profesionales. Si ellos lo pudieron hacer, ¿por qué otros no pueden? Nada llega del cielo y el tiempo no perdona. Aprovechen en hacer algo ahora que son jóvenes. Más tarde el cuerpo no les dará. Peor aún si tienen hijos.

Estudiar, trabajar y mantener una familia a la vez es como barrer una escalera para arriba. No pierdan el tiempo, dejen a los amigos vagos y pónganse a hacer algo.

MÁS INFORMACIÓN:

Tags Relacionados:

Contenido Sugerido

Contenido GEC

Te puede interesar:

Pancholón sufrió por la Toffy

Menos feriados y más trabajo

Las mujeres engañadas

Más en La Seño María

Ni estudian, ni trabajan

Pancholón sufrió por la Toffy

El ejemplo de Santa Rosita

Menos feriados y más trabajo

Las mujeres engañadas

Infieles pierden la cabeza